El Madrid sabe cuándo toca correr

Xurxo Fernández Fernández
xurxo fernández REDACCIÓN / LA VOZ

DEPORTES

03 oct 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

En el Espanyol corren todos. Por todas partes. Lanzas una pelota al aire y hay seis tipos de blanco y azul persiguiéndola como si fuera la última. En el Real Madrid, no. Los de Mou no se desviven en pos de la bola. En defensa la buscan uno o dos jugadores, los más cercanos. En ataque, se turnan tres o cuatro. Suficientes para fabricar espacios sin estorbarse. Para alcanzar en pocos pases y con mucha ventaja la portería rival. Cada gota de sudor da rendimiento.

En partidos como el de ayer poco importa que el Madrid esté roto en dos. Con un único alfiler para evitar el desmembramiento: el dueño del mejor cambio de juego del planeta. Basta con que Casillas esté atento a los tiros lejanos y el rival acaba venciéndose por agotamiento. Y más si le falta un delantero centro. En el Espanyol fue Thievy, de vocación extremo, el encargado de jugar de ariete. Le ocurrió lo mismo que al resto de sus compañeros: se pegó un sofocón para nada. En su ocasión más clara, se durmió.

A los visitantes les sucedió justo lo contrario. Estuvieron muy espabilados. Al cuarto de hora, a Romaric se le fue por nada un zurdazo desde la medular; una jugada más tarde, los pericos perdieron una bola en campo contrario. Kaká, que ya no volvió a intervenir, tocó para Cristiano y este para Higuaín. Tres pases, un gol.

Sergio García, el mejor local

Después de eso, se hartó de chutar el Espanyol. Sergio García, el más talentoso de los locales, volvió loco a todo el mundo, mientras los otros diez se dejaban el físico sin apenas meter miedo. El Madrid se tapó (con algunos errores de bulto en la zaga) y esperó el momento de echarse otra carrera. Bien pasada la hora de juego.

Los pericos llegaron fundidos a ese último tramo, así que cuando Higuaín volvió a arrancar, a Moreno le pesaron las piernas. El Pipita recibió sin nadie encima y puso el 0-2 en la escuadra, cerrando el choque. Weiss pudo volver a abrirlo, pero como tampoco es delantero, la clavó en la valla publicitaria.

Pochettino carecía de recursos en el banquillo, así que contempló impotente cómo su equipo recibía una inmerecida goleada. Callejón aprovechó el último detalle de generosidad de Cristiano (tres asistencias dio ayer) para festejar su regreso a Cornellá y el mexicano Moreno volvió a llegar tarde para evitar que Higuaín se llevase el balón a casa. Nunca un hat trick costó tan poco esfuerzo. Solo hay que saber cuándo echar a correr.

Goles: 0-1, min 17: Higuaín. 0-2, min 66: Higuaín. 0-3, min 81: Callejón. 0-4, min 89: Higuaín.

Árbitro: Teixeira Vitienes (colegio cántabro). Tarjetas amarillas a Thievy, Javi López, Romaric, Lass y Weiss.

Incidencias: Partido de la séptima jornada de Liga, disputado en el estadio de Cornellà-El Prat. Buen ambiente y casi lleno.

Cristian Álvarez, Javi López (Dátolo, min 67), Forlín, Héctor Moreno, Dídac, Baena, Javi Márquez, Thievy (Weiss, min 56), Verdú, Romaric (C. Alfonso, min 74) y Sergio García

Casillas, Arbeloa, Albiol, Sergio Ramos, Marcelo, Lass (Khedira, min 71), Xabi Alonso, Özil (Callejón, min 76), Kaká (Granero, min 84), Cristiano Ronaldo e Higuaín