Récord del mundo para un español

Fernando Castán

DEPORTES

Rafa Muñoz batió la mejor marca de los 50 metros mariposa en los Campeonatos de España

06 abr 2009 . Actualizado a las 12:25 h.

La natación española vivió ayer una jornada de gloria en Málaga, donde Rafa Muñoz batió el récord del mundo de los 50 mariposa y Aschwin Wildeboer el de Europa de los 100 espalda, en el último día de los campeonatos nacionales.

Además, Brenton Cabello y Melquiades Álvarez pudieron con dos de las marcas más antiguas de la tabla de récords nacionales: las de Martín López Zubero, en los 200 estilos de 1991, y Sergio López, de 200 braza de 1990.

Y Erika Villaecija estableció un nuevo récord de España en 400 libre y ganó su plaza para los Mundiales de Roma 2008; y Marina García hizo lo propio en 200 braza.

En total se han sumado veinticuatro récords de España en cuatro días de competición, un hecho que muchos entrenadores y nadadores achacan, en su mayoría, a los bañadores de nueva generación.

En las semifinales de 50 mariposa, Rafael Muñoz batió, con un tiempo de 22,43, el récord del mundo, y en la final se quedó a dos centésimas (22,45). El récord anterior estaba en 22.96 en poder del sudafricano Roland Schoeman, desde los Mundiales de Montreal del 2005, y el de Europa en poder del serbio Milorad Cavic, con 23,11, campeón de Europa y medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Pekín en los 100 metros por detrás del estadounidense Michael Phelps.

El nadador español es el primer europeo que baja de 23,00 en los 50 metros mariposa. Muñoz, nacido en Córdoba en 1988 y del Club Natación Vista Alegre de esa ciudad, había rebajado el sábado el mejor crono europeo en los 100 metros mariposa y se quedó a 18 centésimas del récord del mundo del hectómetro.

«En el libro para siempre»

«No lo asimilo todavía. Estoy en una nube y mañana [por hoy] cuando me levante será otra cosa, pero mañana seguiré siendo un cordobés al que le gusta nadar», explicó Muñoz quien aseguró que «técnicamente la carrera ha sido perfecta, hay una pequeña cosa que hay que corregir, mi entrenador dice que tengo que hacer 22.6 pero por qué conformarme con lo que me diga él si él no va a nadar», consideró. «Ya estoy en el libro de los récords y esto es lo que quería, quedará para siempre», concluyó el cordobés.