El desembarco de LeBron James en el Madison Square Garden, solo veinticuatro horas después de que Kobe Bryant, con 61 puntos, superara la marca del legendario Michael Jordan, de 55, generó una gran expectación y un lleno completo en el histórico recinto deportivo. Los Cavaliers de Cleveland, con James de líder indiscutible, no son la octava maravilla, pero sí lo suficientemente buenos esta temporada como para ganar por 102-107 a los Knicks de Nueva York y seguir en dura pugna por la primera plaza de la Conferencia Este con los Celtics.
LeBron James, que la noche anterior se había convertido en el jugador más joven en conseguir llegar a los 12.000 puntos (con 24 años y 35 días, con lo que superó a Bryant), firmó una auténtica exhibición, aunque se quedó en 52 puntos. El alero de Cleveland ya había advertido que no era un videojuego que pudiese anotar 60 o 70 tantos, pero que iba a hacer el máximo esfuerzo. «No soy ese tipo de jugador, mi filosofía es la de salir al campo y hacer lo mejor para que el equipo consiga la victoria», comentó antes de comenzar el partido. «Tanto Kobe como yo mismo tenemos ese pensamiento, para luego si se da la situación aprovechar el máximo de anotaciones».
LeBron James se quedó en 52 puntos, aún lejos de los 61 de Bryant, pero que lo convierten en el único jugador junto a Michael Jordan que ha logrado dos veces 50 o más puntos en el Madison Square Garden.
James logró su primera hazaña en el Madison Square Garden con 50 puntos, 10 asistencias y ocho rebotes el pasado mes de marzo, mientras que ahora se superó en dos tantos más y consiguió además 11 rebotes y repartió 10 asistencias. De esta forma, James logró el primer triple-doble que se da en la NBA con una anotación de 50 o más puntos desde 1976.