Fran tiene tres hijos: Carlota, Nicolás, que es el mediano, y Macarena. «Nico ha mejorado mucho en el poco tiempo que lleva jugando. Fue al primer entrenamiento asustado, pero ahora está enganchado al fútbol», detalla el padre. Él le ayuda en la formación: «Le enseño cosas básicas. Regate, control, disparo...». Al ex capitán blanquiazul se le nota incómodo hablando de su Nico. «Es que aún es muy chaval. Mejor que te cuente su entrenador». Su técnico en el equipo benjamín de primer año del Montañeros es Alex Roo. Acaba de terminar el entrenamiento en Elviña y mientras Nico corretea tras un balón habla para La Voz: «Tiene 6 años, es prebenjamín de primer año, y juega con los de 8 casi siempre porque es muy bueno. ¿Virtudes? Muy buen toque de pelota, regate y pase. Pero la gran diferencia con los demás la marca cuando recibe la pelota: se sabe girar, pisarla, tiene muy buenos fundamentos y visión de juego», añade Roo. Fran pregunta al periodista qué le ha dicho el entrenador. Sonríe satisfecho al escuchar la catarata de elogios. Orgullo de padre. Llega Nico, recién duchado. Cuenta que su jugador favorito es Messi. ¿Cuántos goles has marcado? «No lo va a saber», responde Fran. Sí lo sabe: «Siete en Liga. Van cuatro partidos y uno no lo jugué», precisa el crío.
El hijo de José, zurdo como Fran
A la conversación atienden José Ramón y su hijo pequeño, David, de 11 años (la mayor es niña, Andrea). El vástago del hombre que levantó el primer título del Dépor también juega en el Montañeros, en el alevín A. Luis Ucha, del Orillamar, el Pulidor de los hermanos de Carreira en sus tiempos como técnico deportivista, lo ha visto jugar: «Es zurdo como Fran. Y tiene calidad», analiza. José prefiere que lo juzguen otros, y remite al técnico del alevín A, Javier Losada: «Destaca por su seriedad. Es un excelente compañero, muy responsable. Juega de mediocampista por la izquierda. Muy técnico. Y mete goles». «¿Qué te ha dicho el entrenador?», se interesa José. «Que es muy responsable», responde el periodista. «Demasiado, demasiado», asiente el padre.