El Dépor-Murcia que incendió Riazor

Pedro J. Barreiros

DEPORTES

El duelo, que concluyó con el ascenso coruñés a Primera, se suspendió a causa del fuego en la grada de Preferencia

27 mar 2008 . Actualizado a las 10:01 h.

Ya pasaron 17 años, pero el encuentro enfrentó al Deportivo y al Murcia (2-0) el 9 de junio de 1991 unió a ambos clubes para siempre. Los visitantes, líderes todo el campeonato, se dejaron el ansiado ascenso a Primera División en A Coruña. El Dépor abrió una etapa de títulos y Liga de Campeones. Solo dos temporadas después su rival cayó a Tercera División. El relato de sus protagonistas recuerda los grandes momentos del partido: el espectacular incendio en la grada de Preferencia, que obligó a suspender el partido hasta su extinción, los goles de Stoja y la explosión de júbilo tras el pitido final del árbitro.

STOJADINOVIC

«Son tres puntos clave; si hace falta, ya me visto yo de corto para que salgan corriendo»

Sus dos goles lo convirtieron en el héroe del partido. «Había muchos nervios y cuando vimos el incendio no nos lo podíamos creer. Llevábamos toda la semana hablando, yo no dormí la noche anterior y la gente echaba ajos al campo, pero parecía que aquel día lograban el efecto contrario», explica el delantero, para quien aún resuenan los ecos de la celebración posterior: «Después de ganar al Murcia tuvimos fiesta durante dos semanas seguidas».

Para Stoja, el Dépor actual ha recuperado el pulso tras un nefasto inicio. «Hace dos meses lo veía muy mal, es más, para mí era uno de los favoritos para bajar, pero ahora está bien, aunque ojo con el Murcia, porque es un equipo complicado», avisa. El balcánico concede tanta importancia a los puntos que, entre risas, se ofrece a Lotina: «Si hace falta, ya me visto yo de corto para que salgan corriendo».

MARTÍN LASARTE

«Al final me quedé con la ropa interior y los calcetines, y uno hasta me pidió las vendas»

El defensa recuerda que el Murcia «había jugado una campaña tremenda, pero pinchó en el partido decisivo». El choque, sin embargo, resultó complicado. «Primero, el fuego, porque aquello no era solo humo, había llamas y me acuerdo de la cara de la gente, que corría despavorida por la pista y me produjo preocupación. Luego cuando se solucionó todo, me quedé más tranquilo», indica antes de hablar del choque en sí: «Nos fuimos al vestuario con los fantasmas de que no subíamos -apunta-. Pero salimos al segundo tiempo y noté que el equipo estaba decidido. Me acuerdo de Fran y José Ramón, que eran unos niños, y cuando salgo al campo y les veo esa decisión, esa seguridad, me convenzo de que vamos a ascender», añade. Lasarte guarda un mural en su casa de Uruguay con las mejores imágenes del encuentro. «En una salgo con el torso desnudo y es que la gente bajó de la grada y lo arrebataba todo. Me quedé solo con la ropa interior y los calcetines. Uno hasta me pidió las vendas».

El ex futbolista, ahora entrenador, cree que el del domingo «puede ser un partido bisagra para demostrar que ahora el equipo está fuera de todo problema y marcar una diferencia importante con tus rivales». «Ellos están complicados y el Dépor ha sacado una serie de resultados, como el del Madrid, que les ha permitido dejar una situación también muy comprometida y eso no se puede echar todo a perder ahora», agrega Lasarte.

ASPIAZU

«Uno se hace futbolista para vivir sensaciones como las de aquel partido»

«Mi primer recuerdo es la ansiedad por el incendio. Era un duelo vital, pero primero tuvimos que recuperarnos del susto, se tuvo que demorar el partido media hora y con la trascendencia que tenía y aquellos acontecimientos se hizo aún mucho más duro», dice Jon Aspiazu, que recuerda los dos goles de Stoja «y un balón que saqué bajo palos».

El actual segundo entrenador del Espanyol asegura que la temporada «fue muy dura, porque hubo una refriega a cuenta de una celebración que hicimos los jugadores y nos acusaron de falta de profesionalidad, cuando era una simple cena para celebrar los carnavales». Sin embargo, Aspiazu señala que alcanzar el objetivo hizo olvidar todo. «Uno se hace futbolista para vivir sensaciones como las de aquel partido. Siempre quieres jugar este tipo de encuentros. Ya nos había pasado en la promoción con el Tenerife, en Copa con el Valladolid,...», recuerda.

JOSÉ RAMÓN

«El incendio de la grada me impactó, nunca había visto una cosa igual»

El ex deportivista se acuerda del choque como uno de los que pasó más nervioso de toda su carrera. «El incendio de la grada me impactó, nunca había visto una cosa igual, no sabíamos si se suspendería el partido, hoy seguro que se hubiera suspendido. Entonces por los pasillos se decía: ''Solo falta ahora que pase algo''. Había miedo por lo que pudiera suceder, porque estábamos acostumbrados a sufrir por los ascensos», asegura. José Ramón afirma que el vestuario estaba conjurado para subir: «Eran tantas las ganas que tenía de hacerlo bien, de ascender, que recuerdo que salimos al campo muy concentrados y empezamos un poco acelerados. Yo perdí un balón en defensa y ellos crearon una ocasión clara de gol, pero poco a poco nos soltamos y fuimos justos vencedores».

Solo le quedó una espina: «Stoja marcó y fue el héroe del partido, y en su momento me daba igual, pero yo tuve un mano a mano con el portero al final, y se me fue el balón y perdí la ocasión. En aquel momento no le di importancia, pero ahora te queda el sabor de boca de decir si hubiera marcado aquel gol...».