El Celta debuta en Segunda con un triunfo adaptado a la división

Víctor López E. ESPECIAL | ALMERÍA

DEPORTES

Venció al Almería con un gol de Jandro, de penalti

29 ago 2004 . Actualizado a las 07:00 h.

El Mediterráneo sirvió de escenario para la primera victoria celeste en Segunda. Los vigueses han abierto la Liga con un resultado que puede servir para generar ilusión entre el celtismo. El Celta de la era Vázquez está todavía por definir. A lo que muestra en la actualidad se le notan muchas carencias y algunas virtudes. Por ejemplo, en defensa aún están lentos y blanditos. La línea creativa es buena pero le falta un rematador. Entre lo positivo una excelente condición física global. El primer cuarto de hora de partido generó desesperación. Un sopor inaguantable y el reencuentro con una categoría que el aficionado celeste tenía por fortuna olvidada. Un ya archivisto fallo de Contreras estuvo a punto de costarle al Celta un buen disgusto y de poner a sus compañeros en luz roja. Sergio está lento en su intento de proteger un balón ante Ibán Espadas. La llegada de Contreras parece que sirve para controlar la situación pero el defensa chileno se confía y es Isaac quien le roba la pelota. La ingeniudad del ex futbolista del Lorca impidió el gol. La diferencia entre Nacho Franco y el delantero local Ibán Espadas es que el almeríense sin tener más calidad que el canterano celeste, sí mostraba descaro. Tanto como para poner a la zaga viguesa en numerosos aprietos. En uno de ellos de no ser por una mano prodigiosa de Pinto hubiese puesto el marcador con ventaja andaluza al descanso. Nada más iniciarse la segunda mitad se lesionó Sergio. Enésimo contratiempo del asturiano que es algo parecido al Guadiana en sus apariciones por las alineaciones célticas. Méndez tomó con la seriedad acostumbrada el relevo. Capucho seguía sin mostrarse rápido pero los reflejos del portugués eran como los del correcaminos comparados con los de Cervián que cometió un penalti absurdo sobre el celeste. Jandro tuvo que tirarlo dos veces y en ambas engañó a Valerio aunque en la que valió para el árbitro el balón golpeó antes de entrar en el palo. El Celta ganaba y pudo sentenciar pero Capucho dio otra prueba de su falta de tono. Una soberbia asistencia made in Gustavo López la desperdició con todo a su favor en lo que debió ser el 0-2. El Alme¿¿ria empujó perolos vigueses no pasaron apuros.