Gibernau acecha a un Rossi menos poderoso

Toni Silva REDACCIÓN

DEPORTES

Queimadelos | Kai Försterling

Este domingo, Sudáfrica abre el Mundial 2004, con un Valentino que ofrece dudas tras su incorporación a Yamaha

14 abr 2004 . Actualizado a las 07:00 h.

El circuito sudafricano de Welkom inaugura el Mundial de motociclismo del 2004, un año en el que el duelo más intenso enfrentará a un piloto contra varias escuderías, Valentino Rossi contra Honda, después de la fuga del italiano a Yamaha, que se ha hecho con el mejor piloto del circuito (campeón los últimos tres años en MotoGP) para compensar una evidente endeblez mecánica, aunque Rossi se ha llevado consigo a su director mecánico, Jeremy Burgess. Así, las fuerzas parten muy igualadas porque el mejor jinete dispone, en principio, de la peor montura. El norteamericano Colin Edwards lo ha resumido de una forma gráfica: «Va a ser un rodeo divertido». Pero en Honda se ha abierto una especie de guerra civil. En principio, se guarda en la manga algunos caballos de potencia y un motor de seis cilindros, que podría desempolvar en pocas semanas si Rossi se pone bravo. Pero lo que peor han encajado los pilotos de la marca japonesa es el favoritismo que ésta ha desplegado con los dos miembros del equipo Repsol, Alex Barros y Nicky Hayden. El triste final de Daijiro Kato en el circuito de Suzuka (murió tras un accidente en la primera carrera del Mundial del 2003) ha roto el anhelado sueño de Honda de encumbrar a un japonés en la cilindrada reina. Fue su compañero del equipo Telefónica Movistar, Sete Gibernau, el que estuvo más cerca de apartar de la cumbre de MotoGP a Valentino. Sete ganó cuatro carreras y concluyó segundo el mundial (transcurrido el ecuador de la temporada, el catalán llegó a superar en triunfos al italiano). Es decir, con una moto peor mantuvo un mano a mano con el claro favorito. La conclusión: Gibernau es el máximo favorito a la espera de que se despeje la incógnita de la simbiosis entre Valentino y Yamaha, que han dado buenas vibraciones en los ensayos de pretemporada. También es de esperar un mayor rendimiento de Max Biaggi, el eterno secundario, ya tercero según la última clasificación mundialista. No obstante, el italiano de la perilla habla como un campeón: «Estoy preparado para hacer realidad los sueños de mis fans», dijo en la presentación de este año. La reaparición de Ducati en el 2003 no defraudó. Loris Capirossi concluyó el Mundial en cuarta posición después de auparse al podio en media docena de ocasiones. La Ducati puede fallar en muchos aspectos, pero no se le puede acusar de falta de potencia: en los entrenamientos de Montmeló Capirossi registró un paso por meta a una velocidad de 347 kilómetros por hora. El 2004 se prevé como otro año de discreción para Kawasaki (pilotadas por Nakano y Hofmann) y Suzuki (Kenny Roberts y Hopkins). Todos los pilotos volverán a enfrentarse a algunas novedades legales, un aspecto poco agradable para los protagonistas de las dos ruedas. Los cambios de este año se dan exclusivamente en MotoGP, con una formación de parrilla de salida con filas compuestas por tres motos, en lugar de cuatro. Rubén Xaus Tiene 26 años y su altura (1,83) no es propia de la élite del motociclismo. Rubén Xaus, es el último español en desembarcar a la categoría reina, de la mano de Luis d'Antin, con un proyecto sucedáneo de Ducati. Xaus procede de las Superbikes, donde se ha proclamado subcampeón. El otro español, Carlos Checa, será el compañero de equipo de Rossi. Checa confía en poder aprovecharse de las mejoras introducidas al italiano.