Edu Lavandeira convierte el embalse en el escenario hipnótico de un cortometraje que aprovecha sus cualidades paisajísticas para el cine
11 abr 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Una mujer se aísla del mundo en una cabaña en el entorno del embalse de Belesar, donde se dedica a pescar, día y noche, de forma obsesiva. Este es el planteamiento de La pescadora, un cortometraje de Edu Lavandeira, que aprovecha las cualidades paisajísticas de la Ribeira Sacra para crear la atmósfera hipnótica y misteriosa que necesitaba su historia. De hecho, fue antes el escenario que el argumento. «Tenemos unos amigos que tienen una antigua bodega de vino que han reconvertido en cabaña justo frente al embalse», explica el guionista y director. «Cada vez que estamos allí nos decimos que tenemos que rodar algo en ese lugar porque es increíble, muy inspirador: la magnitud del espacio, la atmósfera que desprende... todo es muy cambiante en función del día», añade.
El rodaje de La pescadora, protagonizada por Chela Santalla y Xoán Padín, se desarrolló en noviembre. «El nivel del agua aún estaba bajo y dejaba a la luz muchas de las antiguas bodegas y pistas de lo que fue aquello durante años», recuerda Lavandeira. «Es un lugar misterioso e intrigante al mismo tiempo».
Para sacar todo el partido posible al escenario natural de Belesar, el equipo se valió de drones y cámaras subacuáticas. El uso de la tecnología permite posibilidades estéticas que antes parecían coto exclusivo de las producciones de abultado presupuesto. Eso sí, Lavandeira advierte de que el de La pescadora fue «cero», así que hay que «contar con amigos que dispongan de esa tecnología para que te echen un cable». «Con poco se puede sacar mucho partido», afirma.
El corto de Lavandeira -que acaba de ganar el premio Mestre Mateo al mejor programa de televisión por Buscadores de naufraxios, de Voz Audiovisual- ya ha sido seleccionado por dos festivales de la India y otro de México, además del Redline International de Toronto, que acaba de comunicarles su selección. «Sabemos que la historia que contamos es universal y que por las características del corto puede tener gran recorrido, pero no esperábamos llevar tres festivales internacionales en un mes de vida. Estamos muy contentos por la visibilidad y que se conozca la Ribeira Sacra en la India o México», dice el director. Además, La pescadora se podrá ver en un certamen gallego en verano.
