El actor gallego da vida a Jesús Muñecas, la mano de Tejero, en la película «23-F».
23 feb 2011 . Actualizado a las 15:05 h.¿La película es un retrato fiel o una recreación? ¿Por qué los militares fracasaron? ¿El Rey tenía dos discursos preparados? ¿Y Armada? ¿Fue un golpe de Estado o un secuestro? Luis Zahera (Santiago, 1966) replica ante tanta pregunta sobre su nueva película, 23-F, a las órdenes de Chema de la Peña y con Paco Tous y Juan Diego como protagonistas: «Para, para, que yo solo soy un simple actor».
-Entrar en el Congreso vestido de guardia tiene un punto, ¿no?
-Entrar en el Congreso y encontrarte allí con los impactos de bala impresiona. Que mi primera vez en un lugar donde se vivieron los peores momentos para la democracia sea para rodar una película no deja de ser curioso, pero es trabajo, al fin y al cabo.
-¿Fue un proyecto buscado o le llegó por casualidad?
-Fue a través de la jefa de casting de la película, Rosa Estévez. Me llamó porque buscaba alguien para el papel de Jesús Muñecas, la mano derecha de Tejero en toda esta historia.
-¿Y cómo se vio de guardia civil?, ¿se gustó?
-Nada. Me veo mal, muy mal. A mí el tricornio me sienta fatal. Por lo demás, seriote, como siempre. No sé cómo lo hago, pero siempre me tocan papeles de envenenado.
-¿Es difícil recrear algo tan presente aún en la memoria?
-Hombre, es diferente, porque si mi padre se acuerda de lo que estaba haciendo cuando mataron a Kennedy, yo y toda mi generación recordamos lo que estábamos haciendo el 23-F.
-¿Y qué estaba haciendo?
-Unas diapositivas en papel cebolla sobre la democracia. Estaban dos compañeros de clase en mi casa y entró mi padre y les dijo, muy solemnemente: «Chicos, marchad para vuestras casas y no salgáis».
-¿La película aclara algo o es una versión más?
-El tema está muy manido porque ya se hicieron dos miniseries para televisión. Estuvo el punto de vista del Rey y el de Adolfo Suárez y ahora tocaba hablar más de Tejero. No sé si aclara lo que pasó de verdad ni tampoco si lo pretende. Es verdad que sale muy reforzado el Rey, pero también se deja ver que tenía dos discursos, por si acaso, y hay quien dice que se sabía que Tejero iba a entrar en el Congreso y se consintió porque el fracaso estaba cantado... Pero, bueno, yo soy un simple actor y me voy a meter en un lío por hablar de esto.
-¿Por qué?
-Pues porque todo en general resulta muy extraño. El golpe fue una cosa rara, con un montón de pifias. Si se retransmitió al día siguiente por televisión... No se desconectaron los circuitos internos ni se apagaron los micrófonos. Los golpistas no tenían planos del Congreso. No sé, pero yo solo soy un actor que hizo su trabajo.
LUIS ZAHERA actor