El colegio de Tarrío usa un sistema canadiense para enseñar la asignatura
18 jun 2015 . Actualizado a las 07:55 h.Puede parecer increíble, pero todos los alumnos de quinto de primaria del CEIP Plurilingüe de Tarrío, en Culleredo, están deseando que llegue la clase de Matemáticas. Y todo gracias a un nuevo sistema pedagógico que nació en Canadá y que se denomina Jump Math.
El secreto de este programa de enseñanza es que consigue que los alumnos disfruten aprendiendo matemáticas, mejorando su autoestima y autoconfianza. Y con nociones muy sencillas, lecciones muy estructuradas y ejemplos prácticos guiados y concretos (a veces incluso tangibles) consigue que el alumno entienda y sepa aplicar los conceptos más abstractos. La directora del centro, Ana Liñares, explica que el CEIP Plurilingüe de Tarrío es uno de los pocos colegios de toda Galicia elegidos por la Xunta para participar en esta experiencia piloto. Aunque empezaron algo tarde, ya que los 60 alumnos de quinto de primaria (tienen entre 10 y 11 años) comenzaron a trabajar en febrero con el manual del Jump Math, los profesores ya empiezan a ver los resultados. De hecho, José Manuel Mosquera Rodríguez comenta que los niños con más dificultades para las matemáticas «son os que máis se benefician». «É moi importante que un neno estea motivado, por iso as leccións parten de algo moi sinxelo que todo o mundo pode entender, con exemplos prácticos, e, despois, pouco a pouco, van aumentado a dificultade con moita práctica», explica el docente. Esa motivación, según explica, no solo se consigue con el método Jump Math (la iniciativa presume de que el 93 % de los alumnos mejora su rendimiento académico en un 50 %) porque en el colegio ya tienen una forma de trabajar que refuerza la autoconfianza de los niños: «A partir dun álbum de cromos de fútbol, por exemplo, falamos de xeografía (de onde son os xogadores), de estatísticas (número de goles), e redactamos cartas (aos clubes de fútbol)... Intentamos aplicar tarefas integradas, porque o mundo é global», indica José Manuel. Y los niños encantados. Ellos reconocen que los problemas y los números son más fáciles con el método Jump Math, que se genera el debate y que llegan a sus propias conclusiones. «Es que ahora decimos: ?¡Qué bien, clase de mates!? Con estos libros es más fácil».