Como en la noche de San Juan, nos bajamos ordenadamente, nos cogemos nuestra cinta, nuestra pandilla o familia, hacemos separaciones proporcionales y aquí no coge el coronavirus ni cristo
23 abr 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Será el subidón de que por fin los padres podemos darles una vuelta a los niños y que el horizonte se empieza a despejar un poco que creo que ya podemos ir abordando el tema del verano. Porque necesitamos tener esa ambición y dirigir toda nuestra energía hacia lo bueno, a proyectarnos en esa imagen de vacaciones, de tardes soleadas (aunque baje la niebla por San Pedro) y de alegría. Quiero pensar que lo peor ya ha pasado y que ahora, cuando sabemos cómo hemos resistido, los que volvamos a pisar la calle lo hagamos con la certeza de que todo va a ir bien. Así que sinceramente, lo siento mucho por los de interior, lo siento mucho por los de Madrid, y lo siento mucho por los que disfrutan ahora de sus metros de finca en la aldea, pero los coruñeses contamos con la suerte de que es abrir la puerta de casa y darnos de bruces con el mar. Y ahí, querida Inés, mi alcaldesa querida, estás tú para llevarnos a buen puerto. Porque si nosotros tenemos la fortuna de contar con 13 playas en la ciudad no vamos a ser tan absurdos de pensar que pisar la arena aquí va a ser lo mismo que en Vigo (por poner un ejemplo, que tienen que coger autobús). En Coruña, cada barrio tiene su playa, así que si nos organizamos bien, que yo sé que tú, Inés, estás conmigo, no tiene por qué haber problema a la hora de ordenarnos en las salidas a la playa. Pensemos. ¿Que vivimos en los Castros? Todos los vecinos que se denominen playeros (porque hay muchos que no la pisan ni en verano) pueden bajar por turnos a Oza. ¿Que vives en Adormideras? Te toca el turno de San Amaro, pero tienes también posibilidad de bajar a la de Los Moros, o a la calita de al lado. Los de As Lagoas podemos repartirlos entre As Lapas y Matadero, que les corresponde por ley a los de Monte Alto. Los de Labañou y Los Rosales nos quedamos en San Roque, la cala de la Cetárea, y los más próximos al Portiño disfrutan allí o en la de Bens. ¿El resto, acaso, no pueden repartirse perfectamente entre Riazor y el Orzán? ¡Que si hay que parcelar la playa, los coruñeses somos expertos! Como en la noche de San Juan, nos bajamos ordenadamente, nos cogemos nuestra cinta, nuestra pandilla o familia, hacemos separaciones proporcionales y aquí no coge el coronavirus ni cristo.
Yo lo dejo ahí, Inés, para que le des una vuelta y lo plantees donde haga falta, en el pleno beach o en el foro que se necesite. Pero si los madrileños no tienen playa, si los de aldea tampoco, si los vigueses no la tienen cerca, yo sinceramente lo siento por ellos. Que hubieran nacido aquí. Que no tenemos ese problema, que aún si lo pienso bien, puede haber más kilómetros de arena en Coruña que vecinos que quieran ir a la playa en hora punta. Me falta el dato, pero para próxima crónica, querida alcaldesa, te lo filtro. Inés, lo tienes en tu mano, que ninguna ciudad cuenta con este horizonte de fortuna en este país para el verano. Coruñeses, ¿no estáis conmigo?