Decepción de Mato, satisfacción de Lage en el primer contacto sobre los presupuestos

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago A CORUÑA

A CORUÑA

EDUARDO PEREZ

La portavoz del PP reclama concreción al gobierno local pero no pone líneas rojas para negociar un posible acuerdo

07 nov 2019 . Actualizado a las 19:02 h.

Beatriz Mato no se anduvo por las ramas. El resultado de la primera reunión entre el PP y el PSOE para hablar de los presupuestos fue, para la portavoz popular, una «decepción». Lamentó que el gobierno local no es dio «ni un papel», y recalcó que «esperaba máis, esperaba un documento» con las bases de lo que quiere hacer el gobierno local. Criticó que se les ha convocado un mes después de que empezasen las reuniones con otros partidos, a pesar de que son la «primera fuerza política» y representan a «38.000 coruñeses». Añadió que dada la «falta de concreción» en los objetivos del gobierno, habría sido lo mismo que se viesen «hai unha semana ou un mes».

Lage se mostró satisfecho. Enmarcó las críticas en la «normalidad» de dos formaciones políticas rivales, y vio «positivo» que Mato reiterase que su partido no pondrá líneas rojas para negociar cuando el gobierno local ponga un documento sobre la mesa, «llegue como llegue».

Porque hay dos posibilidades, que el gobierno local alcance un acuerdo con la Marea y el BNG, sus «socios prioritarios», como los describió Mato, o que empiece a tramitar un documento sin apoyos garantizados. Lage subrayó que la prioridad es alcanzar un pacto con la Marea y los nacionalistas, con quienes ya comparten acuerdos políticos. Pero en caso de que no se alcance ese objetivo, la postura del PP de no poner líneas rojas deja una puerta abierta a que el ejecutivo local negocie su abstencion, que permitiría aprobar el presupuesto.

Mato insistió en la necesidad de que la ciudad apruebe unas cuentas, ante la inminencia de una crisis que podría «repercutir no emprego», de ahí su decisión de no poner «líñas vermellas».

La consecuencia inmediata de la reunión fue una advertencia de la Marea Atlántica al PSOE, que ahora tendría que elegir. Pero el portavoz de los socialistas ha reiterado desde el principio del mandato que no vetarán a ningún partido, y ayer insistió en que no hay «cordóns sanitarios», aunque la prioridad sea el pacto con Marea y BNG.