La velutina derrota al león

Toni Silva PADERNE / LA VOZ

A CORUÑA

La plaga de la avispa asiática ha afectado a toda la fauna de la comarca, incluida la mascota de Corax, en Paderne

30 sep 2019 . Actualizado a las 19:50 h.

El temible león tampoco puede con la plaga asiática. Es la punta del iceberg de un mal que asola la comarca, donde la presencia de la velutina ha alterado el comportamiento de la fauna. Basta, por ejemplo, con pasear por las riberas del río Mero en Cambre. Apenas hay nidos de aves, y los que siguen se han escondido en árboles más alejados y sin vistas a la corriente de agua. No solo ven amenazados sus polluelos recién nacidos, sino que la velutina ha dejado sin alimento a toda la avifauna. «Imagina que lo que hace años se repartían estos pájaros ahora lo tienen que compartir con nidos de 2.000 avispas cada uno, así que tienen que emigrar a otras zonas donde no estén las velutinas», señala Lolo Andrade, uno de los mayores expertos en el comportamiento de esta especie invasora.

En Figueiras, Coirós, han atacado crías de gatos. «Tras matar a algunos, intentaron trocearlo, son muy violentas a la hora de alimentarse», explica Andrade, quien expone un caso vivido en su propia casa con animales más grandes que gatos. «Tuve que encerrar a unos cerdos ibéricos recién nacidos porque las avispas los acosaban, solté a las crías cuando les nació el pelo, esa es su mejor defensa», añade. «Pero en la comarca hay decenas de casos de mascotas muertas por picaduras».

En Paderne, Segundo Ares, titular de Corax, un centro educativo con variada fauna salvaje, ha visto morir alguno de sus animales por culpa de esta plaga. «Atacaron una suricata cuando comían carne», relata este amante de los animales. Desde entonces, él y su equipo retiran los restos para no tentar a las avispas, que ya han dejado una importante secuela en el animal que más reclamo despierta en este cuidado recinto, el león Simba. Su cola parece la de un anfibio porque no tiene mechón. Hace varios años rompió un nido ubicado en su entorno y recibió decenas de picaduras. Pasó cinco días atontado por el veneno. Se recuperó, pero la inflamación del rabo trajo de cabeza a los responsables de Corax. «Hablamos con infinidad de veterinarios, el problema es que Simba limpia los tratamientos con su lengua, que es como una lija, así que no hay manera de curar esa parte», se lamenta Segundo, quien hace unos días también tuvo que atender a un lince ibérico que recibió una picadura de avispa asiática en su boca. «Tenía la cara hinchada pero ya está recuperado», señala Segundo. 

El tejón, la mejor arma

El otoño, con la caída de las hojas, descubrirá numerosos nidos, por lo que las llamadas a los servicios de emergencia se multiplicarán. Lolo Andrade, que ha sido reclamado para dar conferencias en todas las provincias españolas donde ha llegado esta plaga, señala que una de las mejores armas para combatir los nidos que se encuentran en el suelo es el tejón.

«Desde la Administración solo hablan del halcón abejero, pero en este tiempo ya no está, en cambio el tejón está todo el año, es el animal más eficaz para deshacer los nidos, las avispas no pueden contra su fuerte pelaje», explica el experto en avispas asiáticas.

La lucha contra la velutina

Jardineros, fontaneros o carteros, gremios atacados por la plaga

Varios cortadores de eucaliptos fueron atendidos esta semana después de ser atacados por velutinas cuando trabajaban en un monte de Oza-Cesuras. Estos trabajadores son habituales víctimas de la avispa asiática, pero Lolo Andrade asegura que cada vez son más las profesiones afectadas. «Los jardineros ya empiezan a revisar los terrenos con mucho cuidado -explica Andrade-, pero también conocemos casos de carteros que se han llevado un susto por haber un nido en el buzón o fontaneros, que descubren avispas cuando levantan algún registro».