La concesionaria del bar de la Torre espera a poder abrir desde el 2015

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

ANGEL MANSO

La compañía reclama más de 377.000 euros al Ayuntamiento de A Coruña por lucro cesante

14 feb 2019 . Actualizado a las 10:07 h.

El 15 de mayo del 2015, el Ayuntamiento suscribió un contrato para la instalación de una cafetería en la Ciudad Deportiva Municipal de la Torre. Aunque el contrato no ha sido rescindido, la empresa adjudicataria del servicio todavía no ha podido abrir el establecimiento, y a la vista del retraso ha presentado una reclamación contra el consistorio, que espera facilitar hoy información al respecto de los trámites.

La adjudicataria, representada por el despacho APS Abogados, presentó su demanda el pasado 10 de mayo del 2018. Asciende a 377.000 euros, correspondientes al lucro cesante. Aunque esa cantidad sería mayor en la actualidad, dado que la cafetería aún no ha podido abrir sus puertas.

Los motivos del retraso son una incógnita para los representantes de la compañía, que critican las prolongadas esperas que han afrontado para que el Ayuntamiento conteste a sus escritos. A día de hoy se desconoce cuándo podrá abrir la cafetería, y la empresa no descarta presentar una demanda en los juzgados.

La concesión tiene un período de vigencia de 28 años, pero los problemas comenzaron desde el principio. En mayo del 2015, a instancias el Ayuntamiento, la empresa presentó una mejora en el proyecto. En principio estaba previsto utilizar una cubierta y paredes de lona, similares a las que se utilizan en las instalaciones del puerto de Barcelona, en el entorno del complejo Maremagnum. Pero la empresa que fabricaba esos modelos no los tenía en producción, y había dudas de que ese tipo de materiales pudiesen soportar los fuertes vientos de la zona. Por lo tanto se optó por utilizar un módulo de plástico, similar al que ofrece información a los turistas, que podría ser retirado en cualquier momento mediante el uso de una grúa. 

Intercambio de escritos

Los permisos definitivos no llegaron, a pesar de que en junio, la empresa recibió un informe técnico en el que se recogía que no había «razones objetivas para proponer modificaciones» al plan. En julio del mismo año se presentó ante el Concello un nuevo informe técnico de un arquitecto en el que se recomendaba adoptar la nueva solución constructiva, pero la instalación siguió parada. En octubre, la empresa presentó un escrito señalando que se encontraba a la espera de una resolución definitiva. No la hubo y en los meses siguientes, «de forma verbal», el gobierno local instó a encargar un proyecto de control arqueológico. Fue presentado en abril del 2016, sin ninguna salvedad para instalar la cafetería. En junio de aquel mismo año, la adjudicataria presentó el proyecto técnico de la instalación eléctrica.

Siguió sin haber resolución definitiva, y en noviembre del 2016 la compañía presentó un escrito ante la «inactividad» del Ayuntamiento. El gobierno local, el 26 de diciembre del 2016, remitió un escrito a la adjudicataria instándole a presentar alegaciones a los informes de Urbanismo y Contratación. La firma respondió el 13 de enero, insistiendo en su deseo de instalar la cafetería.

La empresa envió nuevos escritos en abril y agosto del 2017, solicitando que se dispusiese lo conveniente para iniciar las obras.

Tampoco se produjo una resolución clara del gobierno local. Al fin, en mayo del 2018, a la vista de la «inactividad y dejadez por parte del Ayuntamiento», los representantes de la empresa presentaron una reclamación de responsabilidades contra la administración local, al entender que el retraso le ha provocado un perjuicio económico. La empresa calculó el lucro cesante de 377.136 euros desde principios del 2017, aunque el contrato se firmase en mayo del 2015.

Unas instalaciones deportivas que carecen de un establecimiento así en todo el entorno

En la documentación del proyecto básico y de ejecución de la cafetería se indica que esa instalación es una «petición reiterada de los numerosos usuarios de las instalaciones». El objetivo de la contratación municipal era «solventar ese déficit» y proveer a las instalaciones deportivas de ese servicio «tan demandado».

El Ayuntamiento calcula que unas 300.000 personas acuden cada año a la ciudad deportiva, que cuenta con cuatro campos de fútbol 11, un campo de fútbol 8, dos pistas de pádel y una de baloncesto descubiertas, frontón y un campo de golf de nueve hoyos.

Para cubrir las necesidades de lo usuarios, las instalaciones disponen de unas máquinas dispensadoras de bebidas y aperitivos, pero nunca ha estado disponible un servicio de cafetería completo.

A los ciudadanos que acuden a los espacios deportivos hay que añadir los vecinos y turistas que acuden a ver la torre de Hércules, que sigue siendo la principal atracción turística de la ciudad, o a pasear por sus inmediaciones.

La empresa adjudicataria del servicio, en sus cálculos sobre el lucro cesante, señala que en el 2017 visitaron la ciudad 668.417 personas, 184.069 de ellas mediante los cruceros que hacen escala en el puerto. La compañía estima que al menos un 50 % de esos viajeros visitaron la torre de Hércules y, a partir de esa cifra, calcula el lucro cesante, suponiendo que algo menos de un tercio de los mismos hiciese uso del servicio de cafetería. La empresa también tiene en cuenta el canon a pagar al Ayuntamiento, que asciende a 8.000 euros anuales, aunque en el plan se preveía que fuesen 1.200 euros.