El mayor cambio será el carril bici, un plan de la Diputación que arrancó en el 2012

E. E. A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

12 ene 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Entre las 99 medidas previstas por la Marea para el actual mandato figuraba la «priorización do paso mediante plataforma reservada en vías principais» para el bus urbano, algo que iba acompañado del «deseño e implantación dunha rede eficiente de aparcadoiros disuasorios públicos e gratuítos conectados co transporte público».

Ni eso ni la reordenación de las líneas se han llevado a cabo. El gobierno local pospuso cualquier decisión al respecto, al igual que la peatonalización de la Ciudad Vieja, para la que el PP dio los primeros pasos y que dejó aparcada la Marea, anunciándola ahora para el primer semestre de este año. Tampoco se han puesto límites al uso del coche ?también previsto? ni ha habido cambios en las tarifas del bus, pendientes del nuevo concurso de transporte público que prevé convocar el consistorio y aún sin fecha fija.

La movilidad en A Coruña es hoy casi la misma que había en el año 2015. Iba a ser un eje central en el 2017 y ahora se insiste en que lo será en el 2018. Está previsto que a lo largo de este año se aumente el número de estaciones de BiciCoruña y se compren bicis eléctricas. La bicicleta será, pues, la apuesta para el actual mandato. El Ayuntamiento ha iniciado la construcción del carril bici que unirá la avenida de Pablo Picasso con el campus universitario y el plan se completa con la construcción de nuevos tramos para enlazar con los de los municipios del entorno, un proyecto que financia e impulsa la Diputación pero que no es nuevo. Esas actuaciones se presentaron en el 2012 con Diego Calvo al frente del organismo provincial y las mantuvieron PSOE, BNG y Marea.