Democracia es libertad

Carlos Marcos

A CORUÑA

11 feb 2014 . Actualizado a las 16:00 h.

La presencia de Paco Vázquez en la presentación coruñesa de la Plataforma Movimiento Ciudadano ha servido, entre otras cosas, para que el PSOE muestre su cara mas oculta, la del sectarismo. Parece ser que el ciudadano Francisco Vázquez no tiene, para los socialistas, la libertad de acudir, como oyente, a donde le plazca. Arrecian ahora las lanzas de la mediocridad contra quien fue santo y seña del municipalismo socialista. Las sucesivas citas con las urnas de Paco Vázquez se cuentan por mayorías absolutas, absolutamente lo contrario de lo que sucede desde que Paco renunció a encabezar las listas del PSOE coruñés. En el acto del sábado estaba Paco y también militantes y ex cargos institucionales del PP y del PSOE, acompañados por ciudadanos sin afiliación alguna. En un ejercicio democrático decidieron acudir a escuchar un mensaje nuevo y distinto que oxigena nuestra democracia.

En Inglaterra, Alemania, Holanda o Dinamarca, por poner algunos ejemplos, este ejercicio es normal e incluso obligado para los responsables políticos que quieren tener información de todas las tendencias de primera mano. En un tiempo más difícil que el actual pudimos ver a un Manuel Fraga presentando a Santiago Carrillo en el Club Siglo XXI y no pasó nada. El sectarismo se ha instalado en los grandes partidos pervirtiendo absolutamente el significado de la palabra libertad. Parecen no entenderlo los autodenominados grandes partidos que exigen el carné entre los dientes para acceder a sus actos e incluso, según parece, para acceder con facilidad a determinados trabajos. Lo trágico es que las cúpulas de los partidos no se dan cuenta de la inmensa marea ciudadana que está harta de los procederes partidistas y que ansía recuperar un aire democrático, limpio y respirable que ha sido contaminado por las liortas y enfrentamientos de aquellos que se creen propietarios en exclusiva de nuestra democracia.

Lo que está claro es que ni el fracasado bipartito coruñés del PSOE y el BNG, ni tampoco la eventual mayoría absoluta del PP coruñés han podido borrar la imagen del alcalde Vázquez y que no pudiendo hacerlo desaparecer de la memoria de los coruñeses pretenden lapidarlo con artimañas torticeras. Allá ustedes, pero recuerden que Vázquez elevó la autoestima de nuestra ciudad y ustedes la pisotean. Bueno sería que PSOE y PP entregaran, con sus carnés, una relación de aquellas libertades a las que sus afiliados tienen que renunciar al afiliarse: a que conferencias pueden ir, a que conciertos, que libros pueden leer y que películas pueden ver. El mundo al revés quienes debían proteger las libertades las coartan, las recortan. La Coruña tiene memoria y en nuestro ADN está el respeto a la libertad.