La oposición ve «difíciles de crer» los presupuestos de Culleredo para el 2013
CULLEREDO
El gobierno local aprobó ayer las cuentas para el próximo año: ascienden a 18,9 millones, 1,6 menos que este ejercicio
30 nov 2012 . Actualizado a las 07:03 h.El alcalde, Julio Sacristán, los calificó de «austeros» y «razonables», motivados por la «extraordinaria situación de dificultad económica general», pero la oposición los tachó de «difíciles de crer» (por parte del PP) y «complicados de cumprir, porque o papel pode con todo, pero a práctica é outra cousa» (por parte de Agrupación Progresista de Culleredo). La corporación cullerdense aprobó ayer -con los votos en contra del grupo popular y la abstención de APdC- los presupuestos para el 2013. Ascienden a 18,9 millones, 1,6 menos que este año.
Por «prudencia» y «cautela», explicó el regidor, se ha tirado a la baja en las previsiones. Pese a ello, las partidas destinadas a asuntos sociales ascienden hasta el 10,24 % del presupuesto (55.000 euros más que en el 2012) y llegan casi a los dos millones. Superan las inversiones en obras, que caen un 55 %, quedándose en 1.407.000 euros. Es un descenso que Sacristán atribuyó en gran medida a la desaparición del Plan Urban o la previsión de reducción de transferencias desde otras administraciones. «Seguimos na liña de contención de gasto, pero cumprindo cos nosos compromisos, sen subir taxas nin pedir ningún crédito». «Continuistas» fue otra palabra que usó el alcalde para los presupuestos, sobre los que se debatió ayer una hora.
«Continuistas, pero para mal»
En esa denominación concordó Antonio Cañás, portavoz del PP, «pero para mal, porque ya hemos visto a donde nos han llevado sus anteriores presupuestos, a una deuda de 10,5 millones a todas luces excesiva sobre unas cuentas de 18,9. Son muy difíciles de creer las cifras que nos dan, y ojalá sea por prudencia, pero mucho nos tememos que si después hay ingresos extra sirvan para pagar reconocimientos extrajudiciales, como ya estamos acostumbrados», le espetó al grupo de gobierno local, que confía en reducir esa deuda hasta los 8,7 millones al acabar el año e, incluso, cerrarlo con superávit. Por «responsabilidad» y «sentido común», el PP votó en contra de los presupuestos. Tampoco José Ramón Rioboo, portavoz de APdC, los valoró bien, pero finalmente su grupo se abstuvo: «Non o interprete como un apoio aos presupostos, porque non o é, pero o que non queremos é bloquear o funcionamento do Concello».
Muy pocos asuntos de los llevados a pleno lograron la unanimidad de la corporación: uno fue la adhesión al manifiesto de la FAPE en defensa del periodismo.