En el diseño de las fiestas de María Pita de este año, además de criterios técnicos y culturales, también ha primado el aspecto económico, como demuestra la rebaja en los diferentes contratos complementarios necesarios para el montaje de la estructura del Noroeste Pop-Rock.
Un contrato al que este año se han aplicado criterios de austeridad para reducir en casi un 10 % el coste de los medios técnicos y humanos necesarios para desarrollar el festival, que se celebrará los días 9 y 10 de agosto. En total, las licitaciones para el alquiler del escenario, las estructuras, los equipos de sonido e iluminación o la producción están presupuestados este año en un máximo de 191.000 euros, lo que supone una rebaja superior al 9 % respecto a los 210.000 euros que se presupuestaron para el mismo fin el año pasado.
Además, a diferencia de lo que ocurrió el año pasado, en este ejercicio el IMCE ha optado por trocear en tres contratos diferentes la licitación de todos los servicios necesarios para el montaje, que el año pasado se unificaron en un único proceso.
Se prosigue así en una línea de austeridad que ya se aplicó en el pasado Noroeste, una edición De transición que estuvo marcada por el relevo en el gobierno local. Así, además de un cierto embrollo en la creación del cartel, ya que parte de los grupos fueron contratados por el bipartito y el nuevo gobierno local tuvo que completar las actuaciones que faltaban, se empezaron a vislumbrar los cambios en la concepción del evento. Así, si la Concejalía de Fiestas del anterior gobierno local entendía que no se podía montar una infraestructura en condiciones para el festival con un gasto inferior a los 350.000 euros, el año pasado se organizó todo el evento con 270.000 euros, aunque es cierto que en el cartel solo figuraba un grupo renombrado por día y que la afluencia de público no fue la esperada en alguna de las jornadas.
El ahorro de las fiestas no se circunscribirá solo al Noroeste, sino que también podría extenderse a la batalla naval, que este año tendrá un coste máximo de 90.000 euros, IVA incluido, lo que supone un 15 % menos de los 106.000 euros en los que el contrato salió a licitación en el 2011.
Que se consume o no el ahorro dependerá de la rebaja que asuman las empresas que opten al contrato, ya que el año pasado la firma que se encargó de la organización del espectáculo presentó una propuesta con una reducción del 27 % sobre el presupuesto inicial.
19.040 ?
Un gasto de 191.000 euros
Los tres contratos técnicos supondrán una inversión un 9 % inferior a la del 2011.