Alvedro roza su techo

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A CORUÑA

La marcha de compañías como Vueling (en la imagen de archivo, en su último vuelo) precipitó la caída de pasajeros.
La marcha de compañías como Vueling (en la imagen de archivo, en su último vuelo) precipitó la caída de pasajeros. César quian< / span>

El día 27 llegó al millón de pasajeros, casi cien mil menos que en el 2010

02 ene 2012 . Actualizado a las 11:46 h.

Alvedro respira. La barrera del millón de pasajeros, termómetro de la salud del aeropuerto, se ha vuelto a romper por sexto año consecutivo. A pesar de la crisis. Fue el pasado día 27 cuando se logró la cifra que, tras las sucesivas pérdidas de enlaces que marcaron el año aeroportuario en A Coruña, no todos daban por alcanzable.

A falta de cerrar las estadísticas definitivas, todo apunta que el 2011 se despidió con un volumen de en torno a 1.010.000 viajeros, frente al millón cien mil pasajeros que utilizaron la terminal coruñesa en el pasado 2010.

La caída de viajeros en Alvedro en el último año se sitúa así en torno a un 8 %, una pérdida relevante pero bastante alejada de las previsiones más pesimistas, que apuntaban a un ejercicio con un descenso de tráfico de en torno al 13-14 % y amenazaba con alejar a la terminal del millón de usuarios, una cifra alcanzada en la última década en progresivo crecimiento y sobre la que se han apoyado las sucesivas inversiones y mejoras del aeródromo coruñés.

El balance del movimiento de pasajeros del 2011 refleja el impacto en las instalaciones coruñesas de un año en el que las pantallas de Alvedro han ido quedándose sin líneas, con una programación mermada por la marcha de diferentes operadores. De hecho, en apenas dos años Alvedro perdió seis conexiones, comenzando con la suspensión del enlace con Tenerife de Spanair en el 2009 y que siguió, ya en abril pasado, con la caída del panel de operaciones del vuelo con Zaragoza, precipitado por la retirada de las subvenciones del gobierno aragonés.

Sin embargo, fue tras el verano cuando Alvedro sufrió su principal varapalo: Vueling anunció el fin de las conexiones con Ámsterdam y París, y poco después dejó de operar, tras cuatro años de actividad, el enlace con Sevilla. Casi sin solución de continuidad, Air Nostrum retiró en noviembre también la posibilidad de volar a Bilbao. Ahora, Madrid, Barcelona, Valencia, Londres y Lisboa son los destinos posibles para los viajeros coruñeses, a la espera de que la programación de primavera traiga novedades.

La reducción de enlaces y la pérdida de pasajeros en Alvedro coincide no solo con el comienzo de la ampliación de la pista y el diseño de la nueva terminal, obras que consumirán 200 millones de inversión, sino también con la polémica en torno al desigual reparto de ayudas a los aeropuertos gallegos por parte de la Xunta, que ha comprometido 1,5 millones para Lavacolla y 150.000 euros para Alvedro. Aunque el alcalde aseguró que habrá un trato equitativo, EU anunció ayer que en el próximo pleno volverá a preguntar al gobierno de Negreira qué medidas adoptará para corregirlo.