La fraga menguante de Cecebre

Elena Silveira
elena silveira CAMBRE / LA VOZ

A CORUÑA

El bosque animado perdió en los últimos 60 años cerca del 50% de su espacio verde

17 abr 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

A principios del siglo pasado, la fraga de Cecebre era un bosque frondoso y extenso. Cruzaba la vía del tren, llegaba hasta el río y, según los relatos de Wenceslao Fernández Flórez, se podía llegar paseando entre sus árboles hasta Guísamo, continuando la ruta hasta la fraga dos Ríos. Ahora, quedan algunos espacios intactos con especies arbóreas autóctonas que ocupan una superficie no superior a las siete hectáreas (68.200 metros cuadrados). De hecho, la supervivencia de esta zona, conocida como la fraga de Quintán y, paradójicamente, la más cercana a la gasolinera y a la carretera que conduce a Piñeiro, ha sobrevivido en buena medida por su inclusión en el inventario de bienes de interés cultural (BIC) en 1987 y la especial protección que se deriva de las normas subsidiarias del Concello de Cambre.

Sin embargo, desde la Fundación Wenceslao Fernández Flórez y desde el Concello de Cambre reconocen que esta protección no es suficiente ya que lo que antaño inspiró el libro de Fernández Flórez El bosque animado (1943) hoy en día está amenazada por el asfalto, el trazado del AVE y las talas indiscriminadas. De hecho, en los últimos 60 años, la fraga ha ido menguando de forma gradual y ha perdido aproximadamente el 50% de su espacio verde. El primer teniente de alcalde de Cambre, Xabier Iglesias, considera que fue un error permitir la construcción de la gasolinera en su ubicación actual y reconoce que en años anteriores «non se puxo todo o empeño necesario» para la protección ambiental y paisajístico de la fraga. Por ello, considera que la redacción del nuevo Plan General de Ordenación Municipal (PGOM) podría ser una oportunidad para dar un paso adelante en la conservación de los carballos, castiñeiros y encinas que todavía persisten en el entorno. «Este sería o momento para incluír no PXOM unha figura de maior protección no ámbito da fraga», explica. Pero, además de la iniciativa municipal, considera que los distintos colectivos vecinales y sociales de Cambre podrán hacer sus aportaciones y propuestas al respecto. «Que seguro que serán atendidas», añadió.

Denuncias vecinales

De la superficie que ocupa la fraga, tan solo una parte tiene un régimen de protección específico. El resto, al igual que todos los bosques próximos al embalse de Cecebre, es considerado como un espacio natural de protección general. Esto supone que las especies de lento crecimiento, como el carballo o el castiñeiro, no pueden ser taladas sin un permiso oficial. Sin embargo, tal y como fueron denunciadas esta semana, las prácticas y talas irregulares son más habituales de lo que deberían. En algunos casos pasan desapercibidas, pero otras, son denunciadas ante la Administración. Y, precisamente debido a la denuncia de un vecino de Cecebre, la Consellería de Medio Rural abrió esta semana un expediente sancionador al propietario de la finca en la que fueron talados tres veces más árboles de lo que estaba permitido. El expediente sancionador suponía una paralización de cualquier actividad en esos terrenos, pero el pasado jueves la Consellería de Medio Rural tuvo que abrir un segundo expediente sancionador al propietario porque la empresa maderera contratada estuvo retirando los tocones de los árboles, especialmente carballos, que habían sido talados sin autorización.

Tras las críticas de la asociación ecologista Arco Iris por la falta de inspecciones de Medio Rural en este tipo de talas, la Xunta decidirá con toda probabilidad la próxima semana el tipo de sanción que se impondrá al infractor.