Los vecinos de la zona de la Fábrica de Armas llevan 12 años exigiendo una pasarela a Alcampo «para evitar una desgracia», pues cruzan una vía con 40.000 coches diarios
14 ene 2011 . Actualizado a las 12:23 h.Tal día como el de ayer, hace 12 años, los vecinos de Pedralonga se concentraban para exigir a Fomento la instalación de una pasarela peatonal que uniese la Fábrica de Armas con Alcampo. Y siguen en eso. A pesar de que el Ayuntamiento les aseguró que el Ministerio ya tiene un proyecto para construirla, residentes de la zona volvieron a concentrarse pacíficamente y sin cortar el tráfico. De poco les vale, según dijeron, una promesa. La pasarela la quieren ya «porque es un milagro que en todos estos años no haya ocurrido una desgracia y para evitarla en el futuro, lo deben hacer ya».
Lo que han de vivir estos vecinos a diario para llevar sus hijos a la guardería, que está detrás de Alcampo, o para ir a comprar al área comercial es una auténtica odisea «propia del tercer mundo». No tienen ni un ceda al paso ni una acera. Han de caminar entre los coches.
El «peligroso» trayecto de los residentes de Pedralonga para ir desde sus casas a Alcampo ese así: Primero, han de salvar el tráfico de los que circulan desde Eirís y se quieren incorporar a Lavedra. No tienen otro remedio que compartir asfalto con los coches, pues no hay aceras ni pasos de cebra. Luego han de sortear los automóviles que vienen del Portazgo para tomar Alfonso Molina. Si ya fue arriesgado recorrer esos veinte metros, queda lo peor, pues se ven en la necesidad de caminar por el puente que cruza Lavedra, que carece de zona de peatones. Al acabar el puente, se encuentran con los vehículos que se quieren incorporar hacia Vilaboa desde Alfonso Molina.
Por esas vías pasan a diario 40.000 coches. Y 400 personas, que son los vecinos de la zona que pasan de Alcampo a Pedralonga.
Cien metros en bus
«Muchas personas mayores se ven obligadas a coger un bus en Pedralonga para que les cruce el puente», destacaba ayer uno de los manifestantes. Son apenas cien metros que han de hacerlo en transporte público, con lo que ello conlleva de tiempo -esperar el autobús de ida y luego el de vuelta- y de dinero.
Desde el Ayuntamiento se insiste en que el gobierno municipal ya ha solicitado al Ministerio de Fomento la construcción de la pasarela. «De esta forma, el gobierno local ha respondido siempre a las demandas de los vecinos, trasladándole a la administración titular de la carretera la necesidad de hacer este proyecto. Además, se ha puesto en conocimiento de los vecinos en varias ocasiones la iniciativa municipal y la situación de este proyecto, que Fomento asumirá cuando acometa la ampliación de Lavedra».