Unas 300 personas se sumaron ayer a la protesta con la que la Asociación de Inmigrantes Senegaleses residentes en A Coruña, Aseser Teranga, ponía de manifiesto que quieren que los cambios que se prevén en la Ley de Extranjería faciliten su integración en el país y no supongan más trabas burocráticas para conseguir la regularización de los inmigrantes, más teniendo en cuenta la crisis económica que dificulta el poder acreditar los contratos laborales. «Queremos que no se planteen que las pruebas de estancia puedan alcanzar los cinco años, queremos que la renovación sea asequible», explicaba Mohamadou Mou Tarou Diao, Papis, mediador y asesor social en Aseser Teranga, que es el creador de un himno al inmigrante que se pudo escuchar en la protesta pacífica, que finalizó ante la Delegación de Gobierno, donde explicaron los motivos que les han llevado a salir a la calle. «Europa es nuestra también, nuestra luz también, no solo somos extranjeros, dejamos nuestra vida aquí, lágrimas allá», es parte de la letra de una canción que pretende reivindicar la dignidad del inmigrante y reclamar espacios de libertad para todas las personas, más allá de su nacionalidad. Papis critica la situación de indefensión en la que se encuentran muchos de sus compañeros por no conseguir regularizar sus papeles y las actitudes de ciertos sectores sobre los que pesa aún un cierto temor hacia los inmigrantes de color. Frente a ello, recuerda el dolor de muchos por no poder ver a sus familias en varios años y las dificultades a las que se ven sometidos de forma diaria por sus escasos recursos. «Estamos en el siglo XXI, UE no solo es Europa, los inmigrantes también hemos luchado mucho. Europa si es rica es por la conquista colonial de otras épocas», recuerda.