Núñez Feijoo acaba de comprometerse con la alcaldesa para rehabilitar la zona, y el PSOE local arropa el acuerdo
21 may 2009 . Actualizado a las 13:33 h.El pasado invierno, el casco histórico lanzó varias señales de socorro con la caída de cascotes en diferentes puntos. Las lonas verdes de protección se han contagiado como un virus, y los vecinos ven que las telas se eternizan y los inmuebles se siguen pudriendo por dentro. Pero esta semana ha habido una fotografía para la esperanza. Fue la que retrató a María Faraldo con Alberto Núñez Feijoo. Es la foto del compromiso público del presidente de la Xunta con el casco histórico de Betanzos, el motor patrimonial de la localidad, que sufre un deterioro galopante en los últimos años. La alcaldesa brigantina llevó al despacho del presidente un generoso dosier en el que se detalla la situación de la zona noble de la ciudad de los caballeros y un proyecto de rehabilitación por fases.
De este modo, la Xunta se comprometió a comprar un número indeterminado de casas derruidas para reformarlas posteriormente. ¿Cuántas? Se habló de quince, pero la cifra final dependerá de una próxima reunión entre la alcaldesa y el director del Instituto Galego de Vivenda e Solo. Pero la zona sí está determinada. Se trata de la parte trasera de la iglesia de Santiago, entre las calles Cortaduría y Ferreiros, donde hay cinco casas a la venta, un número claramente insuficiente. «Solo hemos encontrado cinco casas con carteles de venta, pero esperamos que cunda el ejemplo», señala la alcaldesa de Betanzos, María Faraldo. El Concello también ha estudiado la posibilidad de iniciar su plan rehabilitador por las callejas de la rúa Travesa, históricamente una de las más comerciales del casco histórico.
Son más de seiscientas las viviendas de Betanzos que necesitan algún tipo de reforma, parcial o integral, 114 de las cuales ya están catalogadas como de intervención urgente. La alcaldesa reconoce que la tramitación de los expedientes «se está haciendo de forma muy lenta».
Al margen de las intervenciones globales que acometerá de mano de la Xunta, el Concello de Betanzos rehabilitará una vivienda de la calle Irmandiños, que adquirió a través de una donación.
Apoyo de la oposición
El Partido Socialista de Betanzos, principal partido de la oposición en el consistorio, ha mostrado algo más que un tibio apoyo a la alcaldesa en su lucha por recuperar el casco histórico. «Ojalá se pueda llevar a cabo, pero nuestro grupo lo va a apoyar sin ninguna discusión», apuntó ayer el concejal socialista Ramón García, quien declara que el proyecto presentado esta semana en la Xunta «era un proyecto del gobierno local anterior». «Las miras tienen que ser mucho más amplias y la administración autonómica debería implicarse en todos los cascos históricos de Galicia, que son un motor de riqueza -añade García-, y dejarse de macroinversiones como las del Gaiás».
No va por la misma línea el BNG, que calificó de «propagandística» la visita de Faraldo a Núñez Feijoo. Por otro lado, los diputados Carlos Aymerich y Ana Luisa Bouza preguntaron ayer a cuánto asciende la operación de la compra y de la rehabilitación. Para los concejales del BNG de Betanzos «non casan as palabra de María Faraldo sobre a recuperación patrimonial do casco cos feitos do seu goberno durante dous anos» y denunciaron vertidos en la calle Cabildos.