Cayetano, «ansioso» por debutar

A CORUÑA

08 ago 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

Una estrella aterrizó ayer noche en un hotel de Matogrande. A Cayetano Rivera se lo rifan desde los empresarios taurinos hasta los diseñadores internacionales de moda. Con un jersey gris claro, vaqueros y zapatos marrones es fiel a la elegancia de Armani, firma para la que es imagen. Cayetano Rivera Ordonéz se estrena esta tarde en el coso coruñés. «Es mi presentación en A Coruña», comenta en los pasillos del hotel AC de Matogrande.

Sólo han pasado unas horas desde que renunció a torear en Vitoria aquejado de una lesión en la muñeca. Reconoce que «fue un susto pero estoy recuperado». Los aficionados a su toreo, y a su imagen -que también los hay, y muchos- pueden estar tranquilos: el heredero de la saga Ordóñez, con permiso de Fran Rivera, saltará al ruedo, espantando así los rumores que anunciaban su renuncia.

Aunque esta tarde debuta en el Coliseo, no es la primera vez que pisa el recinto. «Hace unos años vine a un concierto pero no recuerdo ahora de quién». Dice que el hecho de que el Coliseo sea una plaza de toros atípica, al estar cubierta, puede convertirse en beneficio para el torero, ya que le evita el riesgo del viento.

Esta tarde pisará el albero en compañía de su hermano, Francisco Rivera Ordóñez, un cartel muy poco habitual fuera de las corridas goyescas de Ronda. «Sí, es muy poco habitual y, además, cuando toreo con mi hermano los nervios se multiplican por dos». Tiene buenas referencias del público coruñés, «me han hablado muy bien».

«La piel de gallina»

Paseando por el hall del hotel donde toma un refresco con unos amigos, la belleza de Cayetano no defrauda en las distancias cortas. «Le ha puesto la piel de gallina a mi mujer», señala el marido de una mujer que no pudo evitar posar con el torero cuando se percató de su presencia. Su amabilidad tampoco pasó desapercibida. «Es muy, muy majo, encantador», señala uno de los trabajadores del hotel. Y es que el matador de toros se mostró dispuesto a todo lo que le pedían y no dudó en firmar varios autógrafos para sus admiradores, a pesar de que llegó al filo de las nueve y cuarto de la noche. Y aún tiene fuerzas para reír cuando una aficionada que ha acudido a que le firme un autógrafo le dice que en A Coruña la gente es más de los toreros que de los toros.

La expectación que ha causado su debut en la ciudad tendrá su reflejo hoy en la plaza, donde está previsto un lleno absoluto. Cayetano, consciente de «la que se ha formado», señala «que más que un halago es una responsabilidad». Después de los autógrafos y los abrazos, el diestro se subió a un taxi. Le esperaba una cena made in A Coruña.