La sombra de los otros

eduardo galán blanco

CULTURA

Con mayor o menor fortuna, Shyamalan siempre ha insistido en la fuerza y vericuetos de la mente

04 feb 2017 . Actualizado a las 09:28 h.

«A veces tantas cosas no caben en una sola persona», dijo alguien para hablar de la esquizofrenia. Y al tema pretende darle un par de vueltas inesperadas -para ser un thriller casi convencional- el director de El sexto sentido. La cosa poco tiene que ver con Psicosis, Sybill o La sombra de los otros, aunque a todas remite.

Con mayor o menor fortuna, Shyamalan siempre ha insistido en la fuerza y vericuetos de la mente. Y, aunque sus películas no acaban de ser redondas -esta tampoco lo es-, sí que abren caminos a la reflexión del espectador, incluso para el más canalla, renuente o prosaico.

Inmediatamente después del logo de la Universal, vemos la imagen de una habitación. La luz dorada de la bombilla parece conducir nuestra mirada hacia la esquina, un vórtice donde se cruzan paredes y techo. Algo, en la composición del plano, junta claustrofobia y fuga.

En esa habitación serán encerradas tres chicas. El secuestrador, que cada vez se les presenta con una nueva personalidad, va a terapia con una encantadora ancianita. Las sesiones de «diván» son lo mejor del filme. Pues, ya lo sabía Freud, todo está en la infancia, entre tíos ogros cazadores y mamás histéricas, armadas con perchas de alambre.

Para su reparto, Shyamalan ha buscado a tres talentosas chicas. Una de ellas -la más protagonista- es Anna Taylor Joy, maravillosa actriz de La bruja, que aquí luce morena. Y la gran Betty Buckley -la mujer de Harrison Ford que desaparecía en el París de Frenético o la «vieja loca» de El incidente- parece sacada de Capra: «Mis pacientes son mi familia».

Por último, el hombre de las mil caras, el escocés James McAvoy, especializado en sufrimientos de la mente -ver Trance o Filth-, como buen profesor Xavier de X-Men, hace de Lon Chaney, pero sin apósitos faciales. Cambiando de piel, simplemente poniéndose un gorro de lana, unas gafas o un amuleto colgante.

Y en la conclusión -inevitable «final abierto»-, en una cafetería, donde la gente sigue la extraña noticia por televisión, el Bruce Willis de El protegido evoca a aquel otro hombre de cristal, en perpetua guerra con su mente.

«Split»

EE.UU., 2016. Director: M. Night Shyamalan.

Intérpretes: James McAvoy, Anna Taylor-Joy, Betty Buckley, Haley Lu Richardson, Jessica Sula, Brad William Henke, Izzie Coffey.

Thriller. 117 minutos.