Francisco vuelve a dar con la tecla del Lugo

Xosé Ramón Penoucos Blanco
x. r. penoucos LUGO / LA VOZ

CDLUGO

OSCAR CELA

Segunda A El Lugo recupera el gen competitivo que había perdido en las últimas jornadas

08 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Hace quince días la afición despedía al Lugo con silbidos tras empatar con el Lorca en un partido en el que el equipo había mostrado su peor imagen de la presente temporada. Dos jornadas después, tras un empate en el feudo del Osasuna y el último triunfo frente al Sevilla Atlético, la situación dio un vuelco radical. El equipo recuperó el gen competitivo que este año llegó incluso a permitir que se colocara como líder y la afición vuelve a creer y cambió los abucheos por aplausos.

El motivo de ese cambio de cara del cuadro rojiblanco se debe esencialmente a que su entrenador, Francisco Rodríguez, ha dado de nuevo con la tecla que estuvo buscando durante los dos últimos meses y que traía por la calle de la amargura al cuerpo técnico.

 Imagen positiva

La imagen del equipo en la visita a Navarra ya no tuvo nada que ver con las de pasadas jornadas. Ir a remolque en el marcador no supuso una losa para los jugadores, que fueron capaces de remontar para igualar el partido y merecieron marcar algún gol más en un excelente tramo final. Fue el apoyo que precisaban para tomar impulso y volver a ser el equipo más reconocible y ambicioso de las primera vuelta.

La cita ante el filial sevillista era la prueba para confirmar la reacción y el equipo demostró, aunque sin demasiada estridencia, que está olvidada la dinámica negativa y que ya están olvidados los últimos tropiezos.

«Ahora jugamos como quiere el míster y se nota. Nos ha venido bien cambiar de sistema. Ahora estamos jugando bien debido a este cambio que resultó positivo para el equipo», manifestó Jaime Romero.

Otro futbolista que también manifestó sentirse satisfecho tras la actuación del equipo ante el filial hispalense fue Josete Malagón. «El equipo estuvo cómodo y tuvimos mucha posesión de balón, lo que hizo que los centrales estuviéramos más protegidos».

El defensa también destacó la importancia de haber concluido el partido con la portería a cero. «El equipo siempre trabaja para no encajar goles, pero no tuvimos fortuna en partidos como Oviedo y Lorca. De todas maneras, todos los equipos sufren alguna dinámica negativa a lo largo del campeonato», aclaró Josete Malagón.

Un dato a tener en cuenta es que en los dos últimos partidos el cuadro del Ángel Carro únicamente ha encajado un gol y sus dos rivales apenas le han creado ocasiones, algo que no estaba ocurriendo en las últimas entregas del campeonato y que confirma que vuelve a estar en la buena senda.

Otro aspecto positivo es que con 53 puntos la permanencia ya conseguida de manera matemática los jugadores pueden afrontar lo que resta de competición con mucha menos tensión y por lo tanto sacar a relucir sus mejores cualidades en un final de temporada en el que la meta del equipo es alcanzar, como mínimo, los 56 puntos y terminar lo más arriba posible.