Pereira completa el puzle de Milla

Antón Bruquetas REDACCIÓN / LA VOZ

CDLUGO

JOAN LLADO | Norte de Castilla

El talentoso jugador aportará desborde y gol a una plantilla que apunta alto  

16 sep 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

La posibilidad era un secreto a voces y ayer tomó cuerpo. Jonathan Pereira (Vigo, 1987) vuelve a Galicia. Firma por el Lugo para tratar de reengancharse a la élite. Completa así el puzle de Luis Milla, cierra una plantilla que apunta alto y a la que aportará desborde y gol. Pereira vuelve al punto desde el que su imagen se multiplicó. Primero, cuando con apenas 16 años abandonó el Unión Santa Mariña -eran los tiempos del Rata, un mote que le pusieron porque siempre jugaba con gente mayor que él- para ingresar en la entonces potente cantera del Villarreal; y después, cuando desde Ferrol anunció que ya estaba preparado para marcar diferencias entre profesionales.    

Ha pasado casi una década. Se consumían los últimos días del mes de julio de 2007 cuando un jugador con aspecto de niño y pequeño como un topo se plantó en el estadio municipal de A Malata para reforzar al Racing de Ferrol en su último regreso a la Segunda División. Tenía 20 años y el cartel de una gran promesa. Era ese perfil de futbolista, decían los que avalaron su cesión desde el Villarreal, que necesitaba minutos para acabar de curtirse, pero, tarde o temprano, aseguraban, emergería una gran figura. Ni un mes tardó en levantar a la grada. A principios de agosto en el trofeo Concepción Arenal destrozó al Pontevedra con tres goles de bandera. Tres goles que decían de él más que cualquier entrevista. Cada vez que encontraba el balón parecía un desfibrilador. Hacía que el equipo contrario se convulsionase. Por el costado o entrando en estampida desde el centro, cuando tocaba el área era imposible de frenar. 

En Ferrol Jonathan Pereira estiró sus 165 centímetros. Pasó a ser un gigante. Llegó a situar al Racing en puestos de ascenso al final de la primera vuelta ?aunque el equipo terminaría descendiendo?. Su estrella estaba en eclosión. Pero, sorprendentemente, nunca terminó de explotar. Se mudó a Santander. Volvió al Villarreal, luego al Betis, de nuevo al Villarreal, al Rayo Vallecano, donde Paco Jémez apenas le dio cancha, y finalmente al Valladolid -esto dos últimos también en calidad de cedido-. Parecía que había nacido para ser jugador franquicia, pero nunca logró interpretar ese papel protagonista. 

«Pocos jugadores en el fútbol español tenían su capacidad de desborde», afirma siempre que se le pregunta por él Juan Veiga, el técnico que, junto a su hermano Jose, dirigía al Racing en aquella campaña. Pereira tenía duende. Alguno llegó a ver en él al sucesor de Maradona. «Llevaba solo unos meses en Villarreal y Benito Floro [que entrenaba al primer equipo] me dijo: ?Algún día se hablará de Maradona, Cruyff, Pelé y Jonathan?. ¡Yo venía de jugar en tierra y él me preguntaba qué me parecería debutar en Primera!», desveló en una ocasión el delantero. 

Aquella profecía de Floro está muy lejos de cumplirse. Los motivos para que las perspectivas se hayan desviado tanto de la realidad son diversas. Su carácter introvertido, el de un chico de pocas palabras en el vestuario, puede que haya sido una losa para su despegue. También está su físico. Ligero y bajito, poco adaptado al fútbol de contacto del área, su hábitat natural, donde da rienda suelta a su enorme talento. Pero esa quizás no es una explicación demasiado plausible en una época donde España precisamente abandonó el choque para manosear la pelota. 

 Con eso es con lo que tendrá que lidiar a partir de ahora Milla. Una pieza capaz de iluminar cualquier partido con un par de fintas y un remate, pero también alguien que con 28 años necesita saber digerir que tal vez no será lo que se esperaba que sería cuando su nombre comenzó a sonar hace ya casi una década. A Jonathan Pereira en el fútbol no le ha ido mal, pero todos los que han compartido césped con él comparten la impresión de que le podría haber ido bastante mejor.  

Dealbert apunta a ser «más inteligentes» con la ventaja en el marcador

«Es fundamental que una vez te adelantas en el marcador, no te remonten», destacaba ayer Ángel Dealbert. El central rojiblanco se ha convertido en un indiscutible en el once de Milla y advertía sobre el próximo rival que el «Leganés es un equipo que, en su campo, es complicado», aunque van con la «idea de seguir imbatidos». En ese sentido cree que es importante «mejorar» las situaciones que se dieron tanto en Oviedo como en Miranda. «Debemos ser más inteligentes en algunas acciones y adaptarnos a los momentos», comentaba.

Dealbert comparecía en el Ángel Carro tras la sesión de entrenamiento de la mañana y en el vestuario ya se hablaba de la inminente llegada de Jonathan Pereira al conjunto lucense. «Lo hemos comentado, pero no sabemos nada. Si viene un compañero será para aportar y bienvenido será». Destacaba el central que la gente con experiencia en Primera es un gran aporte y destacaba que el de Vigo puede ser un refuerzo importante para el Lugo.

La peña Lugopaixon Albivermella cumple años

La peña Lugopaixon Albivermella celebra hoy su tercer aniversario. Joselu, Sergio Marcos y Cendrós asistirán al acto en representación de la plantilla . El acto tendrá lugar en el bar O viño do 45 a partir de las 21.30 horas.