Un Lugo de luces y sombras

Xosé Ramón Penoucos Blanco
x. r. penoucos LUGO / LA VOZ

CDLUGO

Lof

El excelente rendimiento defensivo contrasta con la ineficacia goleadora

22 sep 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

El compromiso ante el Recreativo de Huelva parecía que iba a servir para desvelar alguna de las incógnitas que se ciernen sobre el juego y el rendimiento del Lugo en los primeros compases de la competición. Al final el desenlace se puede calificar como más de lo mismo y las mismas dudas con las que se presentó en el Nuevo Colombino regresaron en el autobús de vuelta al casa.

El encuentro fue casi un calco de lo que los rojiblancos están evidenciando hasta el momento en los compromisos de liga. Comienzo con dominio del balón y del tiempo de partido, mandando con comodidad sobre el rival y no dejándolo prácticamente sin tocar el balón como si de un rondo se tratara, pero careciendo de profundidad en el último pase.

Lo más positivo es que en anteriores compromisos esta racha de dominio se había limitado, como mucho, a medio tiempo, habitualmente incluso menos, mientras que ante el cuadro onubense el dominio, aunque fue aminorando con el transcurso de los minutos se prolongó hasta casi cumplirse una hora de juego.

El incremento en la duración de la intensidad en el juego fue lo más positivo, aunque Quique Setién manifestó al final del partido que «quizá fuimos un poco más pasivos», afirmación en consonancia con lo que ya había advertido antes de iniciar el viaje a Andalucía cuando afirmó que había notado a sus futbolistas con «poca chispa».

A esta teórica falta de lucidez, el técnico sumaba el cansancio del largo viaje, la humedad y la hora inusual a la que se disputóe l partido, factores que ya se contaba que tuvieran incidencia a lo largo del choque, sobre todo en los compases finales.

La otra noticia positiva, posiblemente la más trascendente, fue que el equipo fue capaz de mantener nuevamente su portería impoluta, en esta ocasión sin pasar apenas apuros. La capacidad de sufrir para aguantar un marcador no era precisamente de las mejores virtudes de los lucenses en ejercicios anteriores y ahora parece que han mejorado considerablemente en este terreno, siendo capaces de defender con acierto hasta en los últimos diez minutos en los que se quedaron con un hombre menos. Destacaron especialmente en esta faceta los hombres encargado de defender por el centro, aunque sin desmerecer a los laterales.

En el debe de los rojiblancos hay que poner una jornada más la incapacidad de hacer goles.

En el caso del compromiso de Huelva también es negativo el hecho de que crearon pocas ocasiones y que en ninguna de ellas tuvieron incidencia directa los delanteros.

Las más claras fueron dos remates consecutivos de David Ferreiro y David López que solventó el portero local. A ellas hay que sumar un remate de cabeza en una acción a balón parado de Pita que se encontró con el travesaño. El bagaje fue por tanto demasiado pobre.

La lectura de la última confrontación vuelve por tanto a dejar un Lugo de luces y sombras. El brillo continúa siendo la parte defensiva y la oscuridad continúa una semana más en el bando de los teóricos goleadores.

En lo que a rentabilidad en forma de puntos se refiere, de momento los empates sin goles están sirviendo para sacar al equipo del apuro, pero como se mantenga la tendencia en las próximas jornadas, sumar de uno en uno acabará colocando al Lugo en la encrucijada. Ojalá la confianza que Setíen volvió a refrendar a la conclusión del partido del Nuevo Colombino esté justificada y todo sea únicamente una cuestión de rachas.