—Este tipo de residuos ¿se reciclan correctamente?
—Nos enfrentamos a una gran problemática con la generación y con la gestión de los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos. En 2020, se alcanzó el récord de generación mundial de residuos electrónicos con 53,6 millones de toneladas, según el último informe de Naciones Unidas. Esto representa un aumento del 21 % en apenas 5 años. Además, si seguimos con las actuales tendencias de producción y consumo, se estima que en 2030 llegaremos a 74 toneladas y en 2050 a 150 toneladas. Por tanto, estamos ante la categoría de residuos que más rápido crece en todo el mundo, alimentada por un consumo insostenible, ciclos de vida más cortos y pocas opciones de reparación. Pero lo más grave es que tan solo el 17,4 % de los residuos electrónicos se recogieron y reciclaron, es decir, la inmensa mayoría no fueron gestionados correctamente.
«Desde el inicio de nuestra actividad, llevamos ahorradas más de dos mil toneladas de CO2»
Con el objetivo de mejorar sus procesos, Revertia ofrece a sus clientes un análisis del ciclo de vida de los dispositivos. De ese modo, consiguen —subraya Calatayud— «cuantificar el impacto ambiental que tiene una gestión responsable de los residuos frente a una alternativa de no gestión». ¿Cuáles son los beneficios ambientales? Destacan los relacionados con la reducción de emisiones de CO2 y con el cambio climático.