Pablo Canosa Quintáns, con 35 años, está al frente de la Casa Rural As Eiras, en Lires Cee, un negocio familiar con casi tres decenios de historia. Ahora toma también el mando de APTCM, una asociación prácticamente sin actividad visible alguna durante el último año que aspira a reactivar.
«Eu métome nisto porque penso que é un proxecto que fai moita falta. O que queremos é acabar o labor que iniciou Pan porque xa temos o camiño medio andado. O que si, temos que buscar consenso e tomar conciencia de que a Costa da Morte é de todos. Unir a todo o mundo, pensar que calquera das partes é esencial e deixarnos de temas partidarios», señala Canosa, quien considera que «o propio empresariado ten que saber que isto vai en beneficio del».
Destaca que del sector turístico, igual que ocurre con el de la construcción, «depende imprentas, lavanderías,... moitas cousas» por lo que hace falta un colectivo fuerte que lo defienda. Para ello, en los próximos días van a reunirse con la directiva saliente para que les pongan al tanto y, a partir de ahí, iniciar los contactos con los ententes públicos. A juicio de Canosa esta es una parte fundamental «porque os concellos son imprescindibles».