Crónica | La imagen de la comarca Algunas de las principales guías turísticas nacionales o extranjeras todavía dibujan la Costa da Morte con trazos más míticos y fantasiosos que reales
19 abr 2005 . Actualizado a las 07:00 h.Todo buen viajero, tanto de avión y mochila como de literatura, conoce las guías de Lonely Planet, con acreditada reputación en todo el mundo, desde hace años. De ahí que sorprendan algunos de los datos que ofrece en su página web sobre la Costa da Morte: «Grandiosos acantilados atlánticos, diminutos pueblos de pescadores y aldeas remotas donde pervive la creencia en brujas y almas en pena que deambulan por los caminos». Sigue: «Los vientos, la niebla y las lluvias son temerarios en estas latitudes durante gran parte del año». Los restaurantes ofrecen «pescados y marisco en raciones descomunales», «existen pueblos de granito cuyos hábitos apenas han variado en los últimos siglos, ya sea en Camariñas o Traba», «el viajero no debe extrañarse si le abren las puertas de par en par allí donde vaya al confundirlo con un peregrino». Más que errores, que también los hay, el texto abusa de la mitificación. En su haber hay que destacar que estos trazos de la Costa da Morte aparecen en la página web que Lonely Planet (www.lonelyplanet.es) dedica exclusivamente a España, y la comarca aparece como lugar destacado, justo después de Toledo. La búsqueda de información sobre la Costa da Morte en los principales lugares de Internet es, a veces, un foco de sorpresas. Hay mucho que discriminar: reportajes, ecos del Prestige , galerías de fotos, espacios dedicados al surf, noticias sobre libros que por estos lares no han tenido mucha difusión ( La Costa da Morte , de Estro Montaña. El autor define la comarca como uno de los lugares más hermosos de la Península Ibérica) y hasta especiales en las revistas del corazón, como el que www.hola.com acaba de dedicar a la zona, centrada sobre todo en Camariñas y su área de influencia. En cuanto a sitios oficiales, son dos, al menos, los que llaman la atención. La institución encargada de dar a conocer España en el extranjero, Turespaña (del Ministerio de Economía) lo hace a través de www.spain.info. La Costa da Morte aparece, pero con apenas dos párrafos. Entre ellos, el siguiente: «Cee es la villa más poblada de toda la zona, su antiguo barrio guarda casas de piedra entre estrechas calles. Recorriendo la costa, Corcubión es famosa por su puerto, el más occidental de la península». Fisterra debe de estar, entonces, más allá de la península. El Instituto Cervantes no es una web turística, pero sí tiene páginas en las que se da a conocer lo mejor de España. En este sentido, es de agradecer que en la galería de paisajes, a Galicia le toquen ocho fotos. De ellas, dos son de la Costa da Morte. Hasta ahí, bien, con la salvedad de que las dos son casi iguales: una aldea brumosa y verde de muy difícil identificación, obra de Eduardo Mencos. Privadas, internacionales Resumir las páginas privadas que se ocupan de la comarca requeriría un capítulo aparte, porque hay muchas perlas. Un ejemplo, en www.ociototal.com, la Costa da Morte empieza en A Coruña, Malpica tiene «un entorno salvaje», una población que se llama Corcume tiene «mítico encanto» (Corme también lo tiene), el dolmen de Dombate está en Ponteceso y Camariñas tiene «industria» de encaje. En «Os Muíños, Touriñán, Cee y Corcubión nos impregnan de su olor a salitre, nasa y pesca». Tal vez ese día ocurrió algo. También es muy curiosa la imagen que los extranjeros ofrecen de la Coast of Death, si es en inglés el idioma empleado. Así lo hace una revista sueca ( Bryllupsreisen ). Muy laudatoria, en general, a no ser porque sitúa a Baiona en la Costa da Morte y porque asegura que los alimentos frescos son aquí más baratos que en el resto de España. Páginas optimistas y míticas en exceso, a veces.