Las administraciones aplazan un año más muchos de sus compromisos con la zona

REDACCIÓN CARBALLO

CARBALLO

CASAL

Los recortes presupuestarios y la lentitud burocrática han impedido la ejecución de numerosos proyectos Las administraciones públicas prometen, pero no siempre cumplen. En el balance del año que está a punto de finalizar tienen en su deber una larga relación de compromisos incumplidos, en la mayor parte de los casos debido a la falta de financiación o a la lentitud burocrática. Pero no siempre es así. En Carballo se anunció para mediados de enero la aprobación inicial del Plan General de Ordenación Municipal (PGOM), pero once meses después no ha sido debatido. Algunos concellos tienen intactas varias partidas económicas, si bien hay otros, como Corcubión y Malpica, que ni siquiera han sacado adelante sus presupuestos.

19 dic 2000 . Actualizado a las 06:00 h.

Casi todos los concellos de la zona se han visto afectados por los recortes presupuestarios de los planes provinciales. En el caso de Ponteceso, entre las obras más importantes figuran el acondicionamiento de la Pedra da Serpe y la rehabilitación de la aldea de O Roncudo, paradas por Patrimonio. En el mismo paquete figura el castro A Cidá de Borneiro, en el municipio de Cabana. El proyecto se ha demorado en dos ocasiones y debería estar listo este año, pero las labores ni siquiera han comenzado. En Coristanco, una de las actuaciones más importantes, el parque municipal, lleva cinco meses de retraso. Las obras deberían haber comenzado en agosto, pero se retrasaron por los trámites de compra de los terrenos. Tampoco se ha iniciado la ampliación del edificio de servicios múltiples, aunque ya está firmado el convenio con la Consellería de Sanidade. Plan Miner El plan Miner, que ya lleva un retraso de dos años, incluye las principales obras pendientes en Cerceda, donde tampoco se ha firmado aún el convenio con la Xunta para la construcción del Circuito Galego de Velocidade. Este proyecto ha sufrido continuos aplazamientos en los últimos años. En Carballo, la aprobación inicial del PGOM es la principal asignatura pendiente, a pesar de los sucesivos anuncios realizados desde que comenzó el año. De las actuaciones incluidas específicamente en el presupuesto tampoco se han realizado la apertura del museo ni la ampliación del servicio de recogida de basura a todo el municipio. La implantación de la ORA (ordenanza reguladora del aparcamiento), entre otros proyectos de la Concejalía de Tráfico, tampoco tienen fecha para su entrada en vigor.