El gobierno de Boiro se convierte en tripartito para superar el «bloqueo»

BOIRO

Dorres Torrado, José Ramón Romero y Carlos Rodríguez Muñiz
Dorres Torrado, José Ramón Romero y Carlos Rodríguez Muñiz MARCOS CREO

La edila de Boiro Novo, Dores Torrado, y Carlos Rodríguez Muñiz, que abandona por sorpresa Ciudadanos, se suman al ejecutivo de José Ramón Romero, Martiño

06 oct 2021 . Actualizado a las 20:34 h.

Fumata blanca en la plaza de Galicia. El Concello de Boiro tendrá nuevo gobierno tripartito, a priori, hasta mayo del 2023. Después de estar a punto de caer por una moción de censura orquestada entre PP, Ciudadanos e ICBoiro, el regidor, José Ramón Romero Muñiz, completó un giro de guion tendiendo la mano a ambos frentes ideológicos. Al ejecutivo monocolor socialista se suma la edila de Boiro Novo, Dores Torrado, asamblea nacida al calor de Podemos y las Mareas; así como el hasta ahora edil de Ciudadanos, Carlos Rodríguez Muñiz, de marcado corte liberal de centro.

El pacto, firmado en la mañana de hoy, fue escenificado durante la tarde tras una rueda de prensa en la que los tres políticos dieron su versión de lo ocurrido. A grandes rasgos, esgrimieron que este era un paso fundamental para sacar a Boiro del bloqueo político. Seguir inmersos en esta parálisis administrativa era indeseable tras vivir una pandemia que exige rapidez de movimientos, inversiones y nuevos presupuestos, que hasta la fecha Romero había sido incapaz de sacar adelante en el salón plenario.

El primero en tomar la palabra fue Carlos Rodríguez Muñiz, que dejó caer la bomba de la tarde. Él y toda la lista de Ciudadanos que concurrió a las elecciones del 2019 abandona el partido naranja después de que el comité nacional desautorizase el pacto de gobierno en Boiro. La cúpula no quería saber nada de alianzas con una facción podemita. Como respuesta, Muñiz y su grupo de trabajo tomaron la puerta de salida para «antepoñer os intereses dos cidadáns e estar á altura do que os boirenses demandan».

La moción

No escapó Muñiz de valorar su papel en la moción de censura que pendió sobre Romero, y que consideró de justificada ante el bloqueo político que se vivía. Afirmó también que partió del PP, que no fue capaz de dar salida al acuerdo, por lo que él retomó el diálogo con el resto de fuerzas porque «non facer nada non era unha opción se queríamos servir a Boiro».

Más incisiva en sus palabras fue la edila Dores Torrado, que no dudó en recordarle al regidor que la decisión de querer gobernar con cinco ediles había sido un error del que le había avisado: «O tempo dounos a razón». Si finalmente se decidió a entrar en el ejecutivo, fue para dar «estabilidade e para que o Partido Popular non goberne no noso concello. Mollámonos polo ben do Concello de Boiro».

Sin entrar en disputas, y con un marcado tono institucional, José Ramón Romero, Martiño, dio la bienvenida a los dos nuevos miembros de su equipo de trabajo. No dudó en valorar de positivo el acuerdo, así como clave para salir de la tan citada situación de «bloqueo. É importante para sacar adiante os grandes proxectos». El socialista incidió en que la alianza tiene como objetivo poner a los vecinos por encima de todo, y abrió las puertas a BNG e ICBoiro, con los que reconoció haber negociado para formar parte de este ejecutivo.

Con 18 meses por delante, el reto de desbloquear Boiro tiene ahora un par de protagonistas más, Carlos Rodríguez Muñiz y Dores Torrado, que deberán demostrar que la solución al gobierno en minoría de Mariño era contar con ellos dos.

La alianza cuenta entre sus retos con aprobar los presupuestos del 2021 y construir la residencia de ancianos

La encargada de anunciar cuáles serán los grandes retos del nuevo ejecutivo boirense fue la edila socialista María Luísa Outeiral, quien destacó que la alianza se crea para superar los intereses personales y partidistas y colocar en su lugar los colectivos. Y como principal pilar sobre el que se sustentará el resto del mandato se encuentra la aprobación de unos presupuestos para este 2021.

El ejecutivo destacó que se pretende construir un carril bici que vertebre el municipio y se puso énfasis en la mejora de la recogida de basura. Afirmó también que urge la construcción de la demandada residencia para la tercera edad y la finalización de la sede del club de remo. También entra en sus planes la reapertura de Radio Boiro, la mejora del modelo energético y la llegada del servicio de radiología al centro médico de O Saltiño.

La alianza también ha firmado su compromiso con la puesta a punto de la piscina municipal, otro problema al que el ejecutivo no había podido dar respuesta hasta la fecha. Aunque se antoja difícil responder a todo, con los dos nuevos miembros se espera poder empezar a dar salida a los grandes proyectos que faltan en el municipio.

Los dos nuevos miembros del ejecutivo no tendrán dedicaciones completas o parciales

Dores Torrado y Carlos Rodríguez afrontarán sus nuevas responsabilidades en el ejecutivo municipal sin dedicaciones completas o parciales, ergo, sin un salario fijo. Así lo confirmaron las tres partes implicadas, que destacaron que sí las mantendrán el regidor, José Ramón Romero, Martiño, y el edil Luis Ruiz.

Sobre las competencias de cada uno, el alcalde se reserva las de Representación Institucional, Seguridad y Orden Pública y Participación Ciudadana; Luis Ruiz estará en Urbanismo, Obras y Servicios, Economía y Hacienda; María Outeiral seguirá en Cultura, Educación, Personal y Patrimonio. Marcos Fajardo pasa a Comercio, Consumo y a la gestión del alumbrado, cementerios, limpieza viaria y recogida de basura. Raúl Treus tendrá entre sus responsabilidades Servicios Sociales, Medio Ambiente y Administración General.

En el caso de los nuevos miembros del ejecutivo boirense, Dores Torrado se encargará de Deportes, Mocidade, Feminismo e Igualdade, Lingua y Memoria Histórica. Carlos Rodríguez Muñiz tendrá que hacer frente a los retos de las áreas de Desenvolvemento, así como a las delegaciones de Promoción Económica y Turismo.