Análisis Los pósitos reclaman fórmulas distintas de gestión para unas zonas que pueden ser mucho más beneficiosas
16 oct 2006 . Actualizado a las 07:00 h.El banco de libre marisqueo más rico de Galicia se tambalea. Las riadas del mes de marzo dejaron unas consecuencias muy negativas para el sector de la ría de Arousa. Hace años, el inicio de la actividad en Os Lombos era un auténtico acontecimiento. Ahora, tan sólo un pequeño respiro para cientos de marineros que no tienen otra alternativa. A pesar del esfuerzo inversor realizado por la Xunta en el Ulla hace unos años, el banco natural aún continúa bastante enfermo. Las cofradías insisten en que es necesario buscar alguna fórmula de gestión distinta a la actual con la finalidad de conseguir unos mejores ingresos. Este año, los resultados en las zonas de libre marisqueo están siendo malos. Tanto en el Ulla como en O Bohído, los mariscadores regresaron bastante decepcionados. La situación en Cabío no es mejor, a pesar de que el arenal se abrió hace ahora quince días. La Consellería de Pesca intentó tímidamente cambiar la situación de estos bancos naturales, pero todavía no se atrevió a una reestructuración en profundidad. Los pósitos saben que si hay una buena gestión, los beneficios se pueden multiplicar y los mariscadores podrán así contar con unos ingresos que ahora se les niegan. A pesar del abandono, los arenales siguen dando muestras de riqueza.