La capilla de San Vicente de O Grove sufre un nuevo ataque: fuerzan la puerta y rompen los cristales
O GROVE
Los recintos religiosos de la parroquia registran este tipo de episodios cada verano
30 jul 2023 . Actualizado a las 17:37 h.La capilla situada en San Vicente do Mar (O Grove) volvió a ser objeto de actos vandálicos. Esta mañana aparecieron la puerta forzada, rotos todos los cristales de las ventanas de la sacristía y rota también una maceta que no pertenecía al templo y alguien dejó allí. Así lo explica el párroco de San Vicente, Juan Ventura Martínez, quien tiene previsto presentar mañana la pertinente denuncia en el cuartel de la Guardia Civil. No será la primera.
Esta capilla, que está situada al lado de la urbanización de Pedras Negras —una de las zonas más turísticas de O Grove— ya registró un hecho similar en julio de 2021, y en 2015 el caso fue todavía más grave porque le prendieron fuego y profanaron el interior del templo.
La iglesia parroquial tampoco es ajena a este tipo de episodios. En agosto del 2022 aparecieron pintadas en la puerta y, como en ocasiones anteriores, cristales rotos y demás restos del botellón en las inmediaciones del cementerio. Eso, la concentración de jóvenes para beber a altas horas de la noche, parece ser el contexto en el que se producen estos actos vandálicos. Ante esta situación, el párroco se está planteando retirar el banco situado bajo los soportales de la capilla en aras de ponérselo un poco más difícil a los chavales a la hora de organizar sus fiestas nocturnas, aunque Juan Ventura no es demasiado optimista.
Entre tanto, no puede hacer más que denunciar y apelar al civismo. «Entrar en una propiedad privada a la fuerza es un delito de allanamiento, pero entrar en un lugar sagrado es un una profanación. Es triste ver cómo cada año ocurren en nuestra parroquia situaciones incomprensibles como esta: ¿qué hay de divertido en romper los cristales de la casa de alguien, y más en una iglesia?», señala el sacerdote a través de la web parroquial. «Creo que desde nuestra condición de personas creyentes no ofendemos a nadie por reunirnos y rezar, nuestra fe nos enseña a respetar a todas las personas por igual».