«Antes mi fuerte eran las Rías Baixas, pero ahora es Canarias»

m.?hermida / m.?alfonso PONTEVEDRA / AROUSA / LA VOZ

O GROVE

MARUXA ALFONSO

Es un gestor mítico de bares playeros. Pero ahora le tira más el negocio de tumbonas en las islas afortunadas

17 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

A Carlos Castaño lo definió este periódico, hace ya algunos años, de la mejor de las maneras: es el rey de las tumbonas y los chiringuitos playeros. Su empresa lleva más de treinta años dedicándose a estos servicios. Este año, las tapas y las cervezas frescas volverán a ser cosa suya en dos arenales incombustibles: A Lanzada y Silgar. Sin embargo, Castaño dice que está con un pie aquí y otro en Canarias.

-Usted lleva treinta años regentando chiringuitos en Galicia, tuvo negocios de hostelería en sitios como playa América, todavía los tiene en Silgar y A Lanzada, ¿son bazas rentables sí o sí?

-Depende del verano. Si te viene buen tiempo haces dinero, si te viene un tiempo regular vas bailando y si te viene malo... mejor no te lo cuento. Antes mi fuerte eran las Rías Baixas, pero cada vez apuesto más por Canarias. Allí tengo concesiones de tumbonas y espero conseguir alguna más. Lo básico es que allí trabajas todo el año y aquí lo fuerte es julio y agosto. Además, los concellos se desorbitaron con los precios, se le ha ido la mano con lo que le tenemos que pagar. Y eso es malísimo porque nos obligan a subir precios.

-¿Todos los concellos siguen esa misma línea?

-Los que tienen playas importantes tienen precios altos. Pero hay diferencias. Sanxenxo, por ejemplo, está cuidando todo el tiempo sus arenales. Silgar es una maravilla y merece la pena porque mueve mucha gente, de hecho tengo lleno de tumbonas muchísimos días. O Grove no los cuida y A Lanzada está fatal y ya no es tan rentable.

-¿Cuánto personal contrata para los chiringuitos de Silgar y los de A Lanzada?

-Pues este verano, en el caso de Silgar, trabajarán 16 personas. Y en el caso de A Lanzada serán 16 porque solo voy a poner dos chiringuitos, los de Noalla.

-Dice que le tira más Canarias. ¿Dejará Silgar y A Lanzada?

-No. Quiero tener más cosas en Canarias, pero seguiré luchando por Silgar, porque es Silgar, y por A Lanzada, dado que es un sitio al que le tengo muchísimo cariño. Pero, en Galicia, ningún otro sitio más, por lo menos hasta que los concellos se den cuenta de que tienen que moderar los precios, que les van a ir quedando muchas playas sin servicios.

Las escuelas de surf también reivindican su espacio en los arenales

Las escuelas de surf se sumaron, hace unos años, a la lista de empresas que tienen que pagar un canon por trabajar en las playas. O Grove fue de los primeros municipios en regular su situación, tras registrar varios problemas entre bañistas y aprendices de esta disciplina en la zona de A Lanzada. Se delimitó el espacio que los deportistas podían utilizar en el agua y se les concedieron unas casetas en tierra, donde poder instalar sus oficinas. Estas se sacan a concurso cada año y, desde entonces, el número de escuelas de surf que pujan por estas licencias no ha dejado de incrementarse. El municipio meco licitó este año tres lugares en la playa de A Lanzada, uno más que verano pasado, y otro más en Mexilloeira. Al concurso se han presentado un total de ocho centros de toda la provincia de Pontevedra. Con el servicio se quedarán, sin duda, aquellas que hayan realizado la oferta económica más sustanciosa. El precio de salida estaba en los dos mil euros por cada una.