La mancomunidad cumple cuatro meses sumida en la parálisis política

Bea Costa
bea costa CAMBADOS / LA VOZ

AROUSA

David Castro -en primer plano- ocupando la presidencia tras prosperar la moción de censura del pasado enero
David Castro -en primer plano- ocupando la presidencia tras prosperar la moción de censura del pasado enero Martina Miser

La comisión ejecutiva no se reúne ni se convocan plenos desde la moción de censura. Meaño vuelve a marcar la agenda de la entidad supramunicipal

26 may 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Cuatro meses después de aprobada la moción de censura que le permitió al PP recuperar el control de la Mancomunidade do Salnés, el presidente, David Castro, sigue sin mover ficha. Ni se convocan los plenos ordinarios que según los estatutos de la entidad deben celebrarse cada dos meses -solo se celebró uno en marzo para resolver cuestiones de trámite- ni se reúne la comisión ejecutiva porque los alcaldes del PSOE, que son mayoría en este órgano, han decidido no acudir en señal de protesta por la gestión del PP, lo cual impide alcanzar el cuórum necesario.

El grupo popular espera anular la mayoría socialista situando a la cambadesa Sabela Fole en la vicepresidencia —con ello la comisión ejecutiva pasaría a tener diez miembros con un empate de cinco a cinco entre PP y PSOE que se rompería a favor de los primeros con el voto de calidad del presidente—, pero esta maniobra se ha truncado, de momento.

El PSOE ya advirtió en su día que la elección de la vicepresidencia pasada la sesión de investidura incumple los estatutos de la mancomunidad y anunciaron que, llegado el caso, recurrirán la votación ante los tribunales. En el PP no comparten este análisis y manifestaron entonces y reiteran ahora su intención de llevar adelante la operación. Pero ha surgido un inconveniente. A principios de abril se conocía la decisión del concejal de Meaño Jorge Besada de dimitir como vocal del Xunta Xeral de la mancomunidad, lo cual deja al PP sin mayoría en este órgano. Necesita recobrarla para poder culminar el proceso iniciado en enero con la moción de censura; esto es, nombrar a Sabela Fole vicepresidenta y votar la dedicación exclusiva de Jose Aspérez para que pueda cobrar un salario por su condición de responsable de Turismo. Ese fue el precio que puso el independiente de Meaño para votar a favor de David Castro después de haberse sentido traicionado por el PSOE —su voto había permitido en agosto a la alcaldesa de Meis, Marta Giráldez, conservar la presidencia—, pero el meañés sigue esperando y guardando silencio.

Cualquier movimiento en la mancomunidad está a expensas de lo que ocurra en Meaño. La elección del sustituto de Jorge Besada sigue pendiente y el pleno para esta votación sin fecha. Debería celebrarse esta semana, pero cuestiones relacionadas con la agenda de la secretaria municipal lo impiden, de modo que se pospone para la primera semana de junio, según informa el alcalde Carlos Viéitez.

Sobre la votación de un nuevo vocal de la mancomunidad surgieron dudas de tipo legal. ¿Basta con cubrir la vacante que deja Besada o es necesario volver a elegir a los dos vocales que le corresponden a la corporación —el alcalde es miembro nato y no se precisa votación—?

Carlos Viéitez opta por la primera opción y anuncia que solo se votará al sustituto de Besada atendiendo a un informe jurídico; en ese caso está asegurado que el nuevo vocal caerá en la órbita del PP teniendo en cuenta que la derecha tiene mayoría en la corporación meañesa. Pero esta decisión se presenta controvertida. «Os estatutos da mancomunidade son claros neste aspecto establecendo que os representantes do pleno municipal na mancomunidade serán elixidos nunha única votación. Non cabe polo tanto a elección dun só representante xa que vulneraría a proporcionalidade na representación dos vogais», explica el BNG. Así las cosas, el escenario político en la mancomunidad sigue lleno de incertidumbre. No obstante, el aparato administrativo se queda al margen y los servicios que reciben los concellos se sigan dispensando con normalidad.

PSOE y BNG cargan contra la gestión del PP mientras Castro dice que todo funciona bien

Como viene ocurriendo desde la moción de censura, la izquierda se muestra muy beligerante con la gestión del PP al frente de la mancomunidad. Los cinco alcaldes del PSOE emitían esta semana un comunicado denunciando «falta de liderado e visión» del presidente y exigiendo «unha maior responsabilidade e dilixencia na xestión da mancomunidade». Y hacían un llamamiento: «É imprescindible que se establezan prioridades claras e se reconstitúan as relacións entre os dirixentes municipais para asegurar o benestar de todos os veciños do Salnés, remarcando que este sempre foi un ente onde imperou o consenso e a cooperación sen importancia da cor política, a cal o PP está abocando a desaparecer».

El BNG también tiene algo que decir respecto a la situación de la mancomunidad después de la reunión que el presidente mantuvo con la conselleira de Medio Ambiente y saberse que la Xunta sigue sin asumir compromisos en firme sobre las obras que precisa el servicio de suministro de agua potable de la comarca. Los nacionalistas acusan al PP «dunha nefasta xestión», de convertir a la mancomunidad «nunha feira» y recuerdan que mientras a O Salnés se le niegan recursos económicos para mejorar el servicio del agua, la Xunta da luz verde a mejoras en la estación de tratamiento de agua potable de Barbanza.

Frente a todas estas críticas, David Castro pide tiempo para demostrar que las gestiones realizadas ante Medio Ambiente darán sus frutos, sostiene que la mancomunidad «segue funcionando» con normalidad y anuncia la convocatoria de un pleno para el mes de junio.