La iglesia del monasterio de Armenteira no tiene quien la abra

Bea Costa
bea costa MEIS / LA VOZ

AROUSA

Martina Miser

El Concello de Meis lamenta la «imaxe negativa» que se está dando a efectos turísticos y pide una solución al Arzobispado de Santiago

18 abr 2024 . Actualizado a las 16:29 h.

El monasterio de Armenteira es el principal exponente del patrimonio religioso de la comarca, lo cual lo convierte en uno de los monumentos más visitados, especialmente en los últimos años al ser parada obligada para los miles de peregrinos que realizan la Variante Espiritual del Camino Portugués.

Quienes quieran rezar o simplemente disfrutar de la belleza y quietud que se respira en el templo se irán de vacío porque, desde la pandemia, son contadas las ocasiones en que está abierto más allá de la cita con la eucaristía dominical.

El asunto ocupa y preocupa al gobierno de Meis pues, aunque no se trata de una competencia municipal, consideran que esta iglesia debería estar abierta todos los días al tratarse de un elemento fundamental en la oferta turística de la comarca. Es la «catedral do Salnés», dice la alcaldesa Marta Giráldez, lo cual le confiere un valor cultural que va más allá del ámbito religioso. La socialista compareció hoy en rueda de prensa junto a su equipo para lamentar la «imaxe negativa» que está proyectando a Armenteira y pedirle al Arzobispado de Santiago, por segunda vez, que tome medidas en el asunto.

El problema viene dado porque la parroquia no dispone de personal que se encargue de cerrar y abrir el templo. Antes lo hacía el cura párroco que vivía en el lugar, pero este ha cambiado su lugar de residencia y no se ha encontrado sustituto. El gobierno local opina que la parroquia no debería tener demasiados problemas para encontrar a una persona de confianza dispuesta a asumir esta tarea y brindan su colaboración en aras de buscar una solución, aunque sin especificar en que medida.

La puerta de la iglesia está casi siempre cerrada frente a lo que ocurre con la entrada al monasterio, que permanece abierta para posibilitar el acceso a la tienda de productos de cosmética que tienen las monjas cistercienses, al claustro y a la oficina de turismo que abre a partir de la primavera. Está por ver si entre la parroquia, el Concello y la comunidad religiosa encuentran la manera de que la iglesia dedicada a Nuestra Señora de las Cabezas abra más días que el lunes de Pascua. Entre tanto, quienes quieran disfrutar de juego de luz y color que desprende el rosetón desde el interior de este templo del siglo XII tendrán que conformarse con verlo en fotos.