Ansiosos por volver a pisar las tablas

Bea Costa
bea costa VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

ADRIÁN BAÚLDE

Teatro no Garaxe, Clámide, Tatana, Aturuxo y las escuelas retoman su actividad tras más de un año sin subirse a los escenarios por culpa de la pandemia

27 sep 2021 . Actualizado a las 20:22 h.

La vuelta a la normalidad no solo pasa por ir a los bares o viajar. La normalidad es también poder ir a conciertos y al teatro y para algunos, además, subirse a un escenario. Con el inicio del curso y el alivio de las restricciones las compañías de teatro aficionado están volviendo a engrasar su maquinaria. Después de dos años horribilis, grupos como Tatana y Clámide han podido retomar los ensayos con el objetivo de pisar las tablas lo antes posible. La compañía que dirige Fátima Rey ya tiene para este mes algunos «minibolos» en agenda mientras que en Clámide siguen esperando por la llamada que los saque de la sequía en la que llevan sumidos desde noviembre de 2020. Solo el Festiclown de agosto les dio un poco de oxígeno.

La pandemia les obliga a reinventarse, literalmente, porque de montar obras con quince actores han tenido que reducir el número a tres, y mejor si pertenecen al mismo núcleo familiar por aquello de no salir de la burbuja. «Tenemos que repensarlo todo para montar obras pequeñas. La idea es volver en 2022 con grupos reducidos», explica la presidenta de Clámide, Aida Rey.

Cuando la vocación es sólida, el arte resiste, pero Aida no oculta que el coronavirus ha pasado factura. «Tenemos una sensación de agotamiento». Hubo algunas bajas porque las circunstancias personales de los integrantes del grupo cambiaron, y, además, sin actuaciones con las que justificar las subvenciones, tampoco hay dinero. Así las cosas, la celebración del 40 aniversario de la compañía no va a tener el esplendor que hubieran deseado y, a falta de un nuevo montaje, deben conformarse con pulir O misterio do tempo, que tuvieron ocasión de presentar ya en Vilagarcía.

Teatro no Garaxe, de Cambados, también está despertando del letargo a que los condenó el covid desde el 13 de marzo. En agosto salieron a la calle para realizar paseos dramatizados con motivo del Albariño no Camiño y ahora retomarán los ensayos con O enfermo imaxinario de Moliere, con «moitísima ilusión», según explica la directora, Rosa Fiel.

En Enxebre de O Grove reconocen que les va a costar arrancar tras el parón de la pandemia mientras que en Aturuxo, el grupo de la asociación O Castro de Baión, esperan poder hacerlo en cuestión de días.

Las escuelas de teatro también se ponen al día. La municipal de Catoira comenzó las clases este viernes mientras que la de A Illa lo hará a lo largo del mes de octubre, según las previsiones de la concejala de Cultura, Rosi Viana.

El teatro está también en la agenda de las ANPA a la hora de organizar las actividades extraescolares y la iniciativa privada entra en escena; la escuela de arte Caliveras, con sede en Vilanova, ya empezó las clases -su última propuesta es la artesanía en cuero- y Coda y Nydia, en Vilagarcía, confían en poder montar algún musical, aunque la mascarilla y las distancias no se lo ponen fácil a la hora de ensayar.

ADRIÁN BAÚLDE

Alba Nogueira: «Son optimista; o camiño vai ser duro, pero está habendo camiño»

Alba Nogueira estrena el 1 de octubre en Vigo el Reino da Extinción de la compañía Amorodio. Será un día especial pues, aparte de suponer su regreso a los escenarios después de dos años, será el debut de esta compañía gestada durante la pandemia mediante el sistema del crowdfunding. A falta de ayudas públicas, Alba y sus compañeros decidieron tomar las riendas de su destino artístico y lo hacen con optimismo, dice. «O camiño vai ser duro, pero está habendo camiño», señala respecto a sus expectativas de futuro. Por de pronto ya tienen cerradas otras cuatro fechas para este otoño-invierno, lo cual permitirá ver a esta joven vilagarciana en acción cerca de casa, en Caldas y en Sanxenxo. La actriz, formada en la Escola Superior de Arte Dramática de Galicia, da vida a Berenguela, una dama de la alta sociedad en la edad media, lo cual le permite cambiar de registro. En su currículo figuran los musicales O Rei da Sabana (2012) y Shrek (2016) y el concurso de televisión Oh Happy Day (2014).

Carmen Villalustre: «Aínda que os recursos son limitados, a xente ten gañas»

A Carmen, el gusanillo de la escena le entró cuando estaba de intercambio en Estados Unidos, al convivir con estudiantes de otros países que hacían baile y teatro. De vuelta a casa, a Sanxenxo, se cruzó en su camino la actriz, directora de teatro y escritora Fátima Rey y entonces vio claro que quería hacer en la vida. A los 20 años debutó en la compañía Tatana y actualmente estudia Arte Dramático en Vigo. «Tiña pensado dedicarme á interpretación pero o ano pasado vin que tamén me gustaba moito a parte teórica do teatro e o que me gustaría agora é ser profesora». Eso sí, sin abandonar los escenarios por el momento. Su última actuación fue hace casi un año con la obra Farsa e licencia da Raíña Castiza y está deseando poder volver a sentir el vértigo que se experimenta ante el público. Ella es de las que confía en que las aguas vuelvan pronto a su cauce. «Aínda que os recursos son limitados, a xente, os actores e os espectadores, teñen gañas de volver ao teatro», señala. Ella la primera.