Hágase la música. En directo, a ser posible

Antonio Garrido Viñas
Antonio Garrido VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

MARTINA MISER

El primer concierto en directo al que asistí, al menos que yo recuerde, fue uno de Cómplices en el campo del instituto

16 may 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

El primer concierto en directo al que asistí, al menos que yo recuerde, fue uno de Cómplices en el campo del instituto. Siempre pensé que ese era un recinto ideal para acoger conciertos, pero sus razones habrá para que no se hagan allí. Y mira que se le ha dado vueltas a este asunto. Un año, hasta los llevaron la explanada de la TIR. Se oyeron más en Vilaxoán, que a pie de palco. Creo recordar que uno de ellos era con Presuntos Implicados. Noche de niebla. No se murió congelada Sole Giménez aquel día de puro milagro. El último en el que estuve en ese mítico campo del ahora Castro Alobre fue el de Manu Chao. Aquel lo recuerda bien Marián, la jefa del bar A Perla, porque batió ese día el récord de bocadillos y, seguramente, el de caja. Los zarrapastrosos son así. Van vestidos de aquella manera, pero hay poderío en muchos de esos bolsillos. Y además no atizan con el Hierro 8 a las señales.

Soy muy fan de la música en directo... pero no me gustan los festivales. Bueno, no me gustan los festis. Lo de la música es lógico. El señor Tomás vendía discos. Muchos. Y los singles se probaban en un pequeño plato que había detrás del mostrador. Era una de las cosas que más me gustaban: ejercer de probador. Llegaban singles nuevos todos los días. El señor Tomás ,además, acostumbraba a comprar también su música. De todos los estilos. De música clásica y zarzuela tiene colecciones enteras. Muchos sin abrir, pero también te podías encontrar el Trilogy de Emerson, Lake &Palmer y cosas similares. Recuerdo haber pasado semanas poniendo rancheras porque unos de una orquesta iban a dedicarse a ese palo y había que escuchar discos enteros.

Son malos tiempos para la música en directo. Y peores para los músicos. Sobre todo para los pequeños. Aquí tenemos muchos. Algunos grandes, pero otros muchos pequeños. La fase 1 no solo da una mínima oportunidad de ir levantando la paletilla a las terrazas. También se pueden organizar actos al aire libre con 200 personas como máximo y sentadas. Se puede hacer la música. Ayúdenles. Llevamos dos meses con streaming. Queremos verlos cerca. Aunque no los podamos tocar.