La pata arousana de un gigante del congelado

Rosa Estévez
r. estévez VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

MONICA IRAGO

La concesión de Cefrico en el Puerto de Vilagarcía se ha ampliado hasta el año 2043

29 oct 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, visitó ayer las instalaciones de Cefrico en el Puerto de Vilagarcía. La empresa de congelados, generadora de alrededor de medio millar de empleos según sus propios datos, es un puntal indiscutible del tejido industrial de la capital arousana. En 2010, en esta firma desembarcó Profand, «unha empresa puxante», que desde entonces ha recibido ayudas millonarias de la Xunta de Galicia para actualizar la factoría arousana. Ayer, Núñez Feijoo acudió a comprobar si aquellos cuatro millones de euros habían sido, o no, bien invertidos. A tenor de sus palabras, parece haber quedado más que satisfecho con el trabajo realizado por el equipo que encabeza el director general de Profand, Enrique García.

Feijoo realizó un recorrido por las instalaciones de la factoría, que cada año elabora más de 60.000 toneladas de producto del mar que exporta a un buen puñado de países de todo el mundo. Feijoo aplaudió esos datos y aplaudió, también, que desde el Porto de Vilagarcía se hayan dado los pasos precisos para garantizar la continuidad de la fábrica en territorio arousano. Y es que, a fin de «dar seguridade xurídica á factoría», se ha prorrogado su concesión hasta el año 2043, según anunció el presidente de la Xunta. Con ese horizonte por delante, la empresa puede acometer con tranquilidad todas las obras y proyectos que necesite implementar en la parcela de 30.000 metros cuadrados -27.000 de ellos construidos- en la que está instalada.

La seguridad jurídica, dijo Feijoo, es una clave fundamental para construir futuro. Y en ese sentido, apeló al Gobierno central para que el reglamento de Costas, que ha puesto en alerta a muchas empresas de la rama mar-industria, no se convierta en una fuente de preocupación, ni deje a «conserveiras e empresas frigoríficas nunha situación de precariedade». La lista del presidente de la Xunta se quedó corta. En ella habría que incluir, también, a las depuradoras de marisco o los cocederos, que temen quedar al albur de una norma que puede acabar arrastrando, además, a mariscadores, bateeiros y, en general, a todo el sector del mar.

Pero volvamos a Cefrico. Tras felicitar a los responsables del Puerto de Vilagarcía por «estalo xestionando ben, cun incremento do 10 % do volume de mercadorías no que vai de ano», Núñez Feijoo centró su discurso en la factoría que acababa de visitar, una empresa importante que ha sabido adaptarse a los nuevos tiempos gracias a su entrada en el grupo Profand. Este, con sede social en Vigo, se ha convertido en tan solo ocho años «no segundo grupo español do seu sector» y en un «exemplo de como as empresas apostan por seguir medrando e por facelo na nosa comunidade». Desde aquí, Profand factura más de 325 millones de euros, genera más de 2.100 puestos de trabajo y tiene actividad productiva en siete países: además de España, Marruecos, Senegal, Perú, India, EEUU y Arxentina. En los últimos tres años, Profand ha adquirido tres empresas: una en Marruecos, otra en Boston y una tercera en España. Se trata de Caladero, una empresa de referencia cuya entrada en el grupo reforzará la posición de este en el mercado de los productos envasados en atmósfera protectora.

El director general de Profand, Enrique García, agradeció las palabras del presidente, así como la visita cursada a Cefrico por este, por la conselleira do Mar, Rosa Quintana, y por otros cargos de la Administración autonómica. También quiso mostrar su agradecimiento a representantes de Mercadona, empresa con la que el grupo mantiene una colaboración estrecha. Martínez aprovechó para definir a Profand como «una empresa gallega, de capital familiar y con vocación de seguir en Galicia sin capitales foráneos».

Mar-industria, el sector en el que Galicia es una potencia

Profand es, explicó Feijoo, la clase de empresa que interesa estimular. Sobre todo, recalcó el presidente de la Xunta, porque el sector «mar-industria é un dos grandes sectores industriais de Galicia, non so dende o punto de vista das exportacións, senón tamén da facturación, do emprego, da marca Galicia...». En ese terreno somos una potencia, ocupamos un lugar de liderazgo indiscutible. «Somos a décima potencia mundial en exportación de produtos do mar, por riba de Xapón ou Islandia», dijo el presidente de la Xunta. Y siguió dando datos: el sector gallego representa el 61 % del valor económico de la industria de los productos del mar de toda España, así como el 57 % del empleo generado por esta. Si traducimos esos números a cifras absolutas hablamos de 6.100 millones de euros y unos 13.200 puestos de trabajo «a tempo completo».

Además, es un sector potente en materia de exportaciones, superando «a barreira da exportación de máis de 2.200 millóns de euros de produtos do mar, cun aumento económico do 70% nos últimos dez anos; e a barreira das 600.000 toneladas, un aumento do 27% no mesmo tempo». Así que «hoxe vendemos máis e mellor», generando un mayor valor añadido, según explicó el presidente de la Xunta, quien también recalcó que los productos facturados en Galicia llegan a 121 países de todos los continentes. Para mantener esa cifra, recordó, la Xunta deberá seguir apoyando al sector. Y también el Gobierno central, al que compete negociar con países como Mauritania, o buscar fórmulas para mejorar «a cotización da xente do mar, que es están a incrementar dun xeito preocupante».