La oferta formativa se concentra este año en el Mediterráneo y Canarias
21 jun 2014 . Actualizado a las 06:54 h.Quienes este año tuviesen pensado iniciar los estudios en el ciclo de Operaciones subacuáticas e hiperbáricas del Igafa han tenido que cambiar de planes. El incremento de las horas lectivas en el centro y la decisión de no contratar un nuevo profesor-instructor se han traducido en que esa oferta formativa haya pasado, por decisión de la Xunta, a ser bianual. El próximo curso no habrá convocatoria de nuevas plazas: solo se impartirá el segundo curso. Así que, quienes aspiraban a iniciarse como buzos a media profundidad no tendrán más remedio que buscarse otras alternativas, esperar un año a que se convoquen nuevas plazas en Niño do Corvo, o probar suerte en alguno de los cinco centros públicos que, en el resto de España, ofertan este ciclo.
Andalucía, Valencia, Cataluña y Canarias son las comunidades autónomas en las que sí se ofrece esta titulación, adscrita a la familia de disciplinas marítimo pesqueras de la Formación Profesional. En Andalucía, el ciclo se imparte en Cádiz, en el centro de Zaporito, donde según la página web de la Junta de Andalucía se ofertan 28 plazas. En Alicante, Valencia, informan desde el centro de formación náutico pesquera que para adquirir la titulación de buceo a media profundidad hay alrededor de una veintena de plazas. Más o menos las mismas que en L?Ametlla de Mar, donde se encuentra la escuela de capacitación náutico-pesquera de Cataluña, donde se ofrecen 24 plazas para nuevos estudiantes. En la comunidad Canaria, por su parte, los estudios de buceo se pueden realizar en los centros públicos de Arrecife (Lanzarote) y en Tenerife.
Mucha demanda
También hay algunos centros privados. No en vano, las plazas ofertadas en centros públicos no son suficientes para absorber a la gran cantidad de aspirantes a hacerse con el título de buceadores de media profundidad. En la escuela de Alicante, por ejemplo, ya se ha cerrado el plazo de preinscripción para el próximo curso y el centro se ha visto desbordado de solicitudes. «La lista de espera va a ser muy larga, siempre lo es», señalaban ayer desde este centro. El exceso de demandantes parece, pues, ser generalizado: desde la escuela de Tenerife reconocen el desfase existente entre la oferta de plazas y el número de aspirantes que reciben cada año, y en el Igafa las listas de espera para hacerse con una de las doce plazas que antes se convocaban anualmente era también importante.
Desde el centro canario indican que el cambio en las normas que rigen la enseñanza exige incorporar «más medios» a los centros en los que se imparten estas. En el caso del Igafa, la pieza determinante que ha llevado a Mar a convocar bianualmente el ciclo es la necesidad de un nuevo profesor-instructor, que se uniría a los tres ya existentes para garantizar la seguridad de los estudiantes durante las prácticas.