Esquerda Unida presentará en los próximos días en el registro municipal de Vilagarcía un escrito en el que solicitará que se convoque un debate sobre el estado del Concello. La intención de esta formación es «que quede claro que estamos ante un Concello que é un bluf». Asegura Juan Fajardo que el gobierno local solo tuvo tres iniciativas, y las tres trataban de «ridiculizar o pobo». Se refiere a la ordenanza de terrazas, a la de circulación y a la de uso de locales públicos. «Pero o que non se está dicindo é que estamos cun plan de axuste que lle está custando aos veciños de Vilagarcía un millón e medio de euros máis cada ano, cartos que se van directamente aos petos de Bankia. Esa é a realidade», dicen.
Al mismo tiempo que realiza esa petición, EU pondrá en marcha una campaña «barrio a barrio», con el fin de solicitar la dimisión del gobierno. Esta campaña se planteó a nivel estatal, para pedir la dimisión del gobierno de Mariano Rajoy, pero la formación quiere extender esa petición a los gobiernos de Feijoo y de Fole. Todos ellos, aseguran, son culpables de «fraude electoral», puesto que están aplicando medidas que no figuraban en el programa con el que concurrieron a las elecciones.
Entre esos incumplimientos, tanto del Gobierno central como del que preside Fole, figura la subida de impuestos. En cuanto a los del regidor vilagarciano, la lista se amplía a su desidia con respecto al empleo -«non fixeron nada para defender o emprego en Cuca»-, o al modelo de la playa, que iba a ser una de sus primeras preocupaciones.
«Os veciños xa ven que esta patraña montada polo PP afecta ás súas vidas», asegura Ramón Bueno, quien pone como ejemplo la polémica surgida en los últimos días en relación con las escuelas unitarias de Bamio y Solobeira -AGE, por cierto, presentó en el Parlamento una proposición no de ley por la supresión de estos centros-. Por eso EU quiere que sean los vecinos, «as persoas que están sufrindo», quienes protagonicen esa campaña que reclama la dimisión del Gobierno y la convocatoria de elecciones.