La plantilla garantiza que seguirá luchando y pide el apoyo ciudadano
23 feb 2013 . Actualizado a las 08:20 h.Pese a que el tiempo invitaba a sofá y manta, la oposición al cierre de Cuca fue más poderosa e hizo salir a cientos de personas -hasta 1.500 según la organización- de casa y sumarse a las trabajadoras de la conservera de Vilaxoán, que pasadas las siete de la tarde salían de la Casa do Mar en una manifestación convocada para expresar su rechazo al cierre de la fábrica. Bajo el sonido de un villancico comenzó la protesta con cánticos de «Ande, ande, ande, ande Garavilla, ande que este año nos dejaste sin cenilla», un triste sarcasmo que dio paso al «Cuca non se cerra» que protagonizó el recorrido por la avenida de A Mariña y Rey Daviña hasta llegar a la plaza de Galicia, junto a otro grito que salía al aire «polo emprego na comarca».
La comitiva la abrían las trabajadoras de Cuca. Detrás, familiares y vecinos que quisieron acompañarlas en esta muestra de rechazo al cierre. También sus compañeras de Cabo de Cruz, y trabajadoras de otras conserveras. Por supuesto, representantes del sindicato mayoritario en Cuca, CC.OO., y de otras centrales, como CIG, CGT y UGT. Y políticos del Partido Socialista, el Bloque Nacionalista Galego y Esquerda Unida.
Una vez en la plaza de Galicia, fue la delegada María José Mariño la encargada de leer un comunicado que los manifestantes interrumpieron en varias ocasiones con sus aplausos. Mariño agradeció el respaldo de los ciudadanos y destacó que la decisión de la empresa Garavilla de cerrar la fábrica de Vilagarcía y trasladar a la plantilla a O Grove repercutirá sobre los puestos de trabajo directos e indirectos. Creen las trabajadoras que en O Grove se generará un exceso de plantilla que desembocará en la extinción de los puestos de trabajo. Además, «os indirectos vanse perder, a pesar de que a empresa diga que garantiza os postos de traballo». «¿Que vai pasar cos empregos dos traballadores eventuais?», se preguntaba.
El manifiesto del personal recalca que la decisión adoptada por la empresa responde únicamente a cuestiones organizativas, y no a que la empresa tenga pérdidas económicas. «Fano para ter máis beneficios a repartir entre os accionistas, sen importarlle as persoas, persoas que levan dedicada toda a vida a conseguir o que hoxe vale Conservas Cuca».
Las empleadas de la factoría vilaxoanesa anunciaron antes de finalizar la protesta que seguirán luchando, y pidieron el apoyo de la ciudadanía «para defender o futuro da nosa fábrica e da nosa comarca». Tras ella habló la presidenta del comité, María José Rey, quien animó a continuar la lucha contra la desaparición de la emblemática fábrica de Vilaxoán.