26 sep 2008 . Actualizado a las 02:00 h.
Apenas dos semanas después de que entrase en funcionamiento, el nuevo colegio de A Lomba despierta ya las primeras protestas. Un vecino de Vilagarcía, Miguel Anxo Abad Sabarís, denuncia un defecto en las ventanas de las aulas que provocan un cierto efecto invernadero, de manera que los alumnos pasan estos días mucho calor en las aulas.
La única alternativa, dice, es cerrar las persianas, abrir las pequeñas ventanas de las que disponen y abrir más las puertas. Así que pide que se tomen medidas y propone algunas provisionales, como colocar sábanas o papeles blancos.