¿Por qué no vamos andando?

La Voz

AROUSA

ALEJANDRO RODRÍGUEZ

El palomar La Semana da Mobilidade ha sido muy fructífera en eventos para Vilagarcía. Ayer finalizó con una serie de juegos lectivos sobre circulación para los más pequeños

22 sep 2003 . Actualizado a las 07:00 h.

¡Ah, los tiempos de la infancia!, ¿se acuerdan de esa canción de Miliki? Sí, la de «¡vamos de paseo, pi, pi, pi; en un auto viejo!». Tanto tiempo tarareando ese estribillo para que ahora nos lo cambien con lo de la Semana da Mobilidade. Y es que estos últimos siete días el Concello de Vilagarcía se ha empeñado en mostrarnos que si queremos ir de paseo, lo mejor es utilizar la bicicleta, o ir a pie, y dejarnos el auto en casa. En las ciudades grandes parece que fue bastante calamitoso. Aquí tampoco se puede decir eso, aunque también hubo sus incidentes, sobre todo cuando cerraron las calles del centro, lo que ocasionó no pocos atascos y caravanas. El domingo por ejemplo, la opción más complicada para circular por Vilagarcía era la de coger el coche propio. La disyuntiva estaba entre el transporte público o la bicicleta. El vehículo bípedo fue el protagonista de la jornada con dos paseos ciclistas, uno al mediodía y otro por la tarde. En el último además participó el ciclista vilagarciano Gustavo César Veloso, el segundo clasificado español en la última edición del Tour del Porvenir para menores de 23 años. En cuanto al transporte público, la empresa de autobuses Pereira ofreció a sus usuarios descuentos en el precio de sus billetes. Las actividades de la semana sin coches terminaron ayer con una serie de eventos mitad lúdicos mitad educativos. Por la mañana, cuando muchos aún nos estábamos quitando las legañas y el mal humor de tener que comenzar el la semana, los niños de distintos centros de enseñanza de Vilagarcía, unos 350, dieron un paseo por las calles de la ciudad aprovechando que muchas estaban todavía cerradas al tráfico. Lo hicieron además como si de jefes de estado se tratara, acompañados por la Policía y por miembros de Protección Civil. Ya por la tarde, en los parques de A Xunqueira y de Miguel Hernández, se siguieron celebrando juegos para los más pequeños donde aprendían las normas básicas de circulación. Los chavales disfrutaban de lo lindo paseándose por el parque como si de Mad Max se tratara, y sin carné ni nada oiga. Sino, fíjense en la foto de la derecha. Y es que a originalidad no hay quien les gane. Para el año que viene, al día sin motor y al día del transporte colectivo podemos sumar otro más, el del carrito del supermercado.