Y ahora un PAI, otra baza de Trabada en su lucha por no perder población

J.A.Q. TRABADA / LA VOZ

TRABADA

CEDIDA

Tras la reciente apertura del asilo y centro de día, en breve estrenará un centro de atención a la infancia

20 jun 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

En dos décadas, Trabada perdió el 36 % de su población, pasando de 1.770 habitantes a 1.121, con los que cerró su censo a 1 de enero de 2018, el último dato oficial homologado por el Instituto Nacional de Estadística. Es la evidencia de un concello que, como tantos de Galicia, no deja de perder población. Con una salvedad. En ese último censo se experimenta la única subida de población en el municipio en las últimas décadas. Trabada tenía 1.117 habitantes en 2017 y un año después experimentaba un crecimiento vegetativo positivo, de cuatro habitantes. Podría ser una anécdota, pero lo cierto es que se rompió una constante. Y como telón de fondo aparece la labor que se está realizando desde el Ayuntamiento para paliar la pérdida de población. Es una labor titánica, probablemente abocada al fracaso, pero cuando menos se intenta poniendo todo lo posible para que la gente siga residiendo en Trabada.

Al ejemplo más reciente de la apertura de la residencia de ancianos, que incluirá un centro de día, se suma ahora un Punto de Atención a la Infancia, una dotación de la que también carecía el municipio y que ya está lista para su apertura el próximo curso, como un servicio más a las familias.

La alcaldesa, Mayra García, impulsó otras medidas innovadoras, como crear una bolsa de viviendas sociales con los inmuebles deshabitados, o una línea de transporte público por las parroquias para los mayores de 65 años que fue pionera en Galicia. El Concello, con una subvención de la Diputación, adquirió una furgoneta adaptada y estableció 16 rutas mensuales por las parroquias, para que los jubilados dispongan de un medio para acudir a la capital para hacer sus gestiones, desde ir al banco a la oficina, al supermercado, al consistorio...

Desde el Concello también se han habilitado líneas de ayudas para premiar la natalidad (de 400 euros por cada niño o niña), para la adquisición de libros y material escolar, para el transporte escolar de alumnos que cursan estudios fuera de trabada, para la contratación de empleados que ayuden en las tareas agrícolas, etcétera.

En el Concello son conscientes de que sin empleo no hay futuro. De ahí que se traten de exprimir las posibilidades turísticas del municipio, apoyando todo tipo de iniciativas e incentivando la promoción turística, apostando por el Camino de Santiago (se va a abrir un albergue de peregrinos en Ría de Abres) y con la próxima inauguración de un museo etnográfico.