Alejandro Picciano, director de La Porteña Tango: «El abrazo del tango es precioso»

y. garcia RIBADEO/LA VOZ

A MARIÑA

DIEGO BLANCO

El grupo, de música y danza, ofrece este sábado en Ribadeo el bello espectáculo «Alma de bohemio»

01 abr 2022 . Actualizado a las 10:16 h.

14 años de vida, unos 700 conciertos en 20 países, 5 discos editados por Melopea y producción de Litto Nebbia es el destacado currículo de La Porteña Tango. Su espectáculo Alma de bohemio llega a Ribadeo este sábado (auditorio, 20.00; entradas a la venta en www.gameoverpro.es). Mientras esperan poder volver a actuar en Argentina tras la pandemia, el director, Alejandro Picciano, señala: «Ahora tenemos bastante agenda. Ya el año pasado trabajamos muy bien. Por lo general, antes era un promedio entre 60 y 80 conciertos al año pero en 2020 hicimos 10. En 2021, desde marzo, fue muy bien pero se complicó a finales. De hecho, este concierto de Ribadeo iba a ser en diciembre. Hasta principios de febrero de 2022 nos cancelaron en casi todos lados, cuando coincidió el omicrón. Hacemos mucha gira internacional todos los años y eso se paró todo por el covid, en Noruega, Irlanda... incluso a Rusia hemos ido un montón de veces, aunque ahora no está la cosa como para ir. De hecho, también fuimos a Ucrania, Bielorrusia, Estonia, muchos países del Este. Teníamos otra gira que era para el 2021 por Alemania, Austria, Hungría, Suiza pero está medio imposible, es complejo. Por suerte, hicimos Grecia el verano pasado. Este año también tenemos muchos conciertos en Portugal, donde hemos ido 50 ó 60 veces. Es un lugar donde actuamos muchísimo, pero ni en 2020 ni en 2021 fuimos ni una vez porque tenían restricciones más grandes. En fin... ¡sobrevivimos!

—¿Cómo sentimos aquí el tango?

—Hay una familiaridad. Casi todos los argentinos tenemos un pariente español, sobre todo del norte. Se ve en los apellidos. Mi familia por parte de padre son italianos y por parte de madre andaluces. Y así somos todos los del grupo. Con Galicia hay una cercanía enorme, pues es notorio que la comunidad gallega en Buenos Aires es como otro distrito.

—Se promocionan como «el grupo de tango de mayor audiencia en Europa en la actualidad»

—También es por la continuidad. Somos un grupo de 14 años. Hemos actuado en muchísimos teatros y muchísimos países. A veces pasa con el tango que, últimamente, los grupos o las orquestas duran muy poquito tiempo. El tango tiene también un punto comercial, la palabra «tango», que llama. A veces los programadores arman un espectáculo equis con gente que se contrata como si fuera El Rey León y si se vende bien, se hace una gira... y se acabó. Es todo muy montado sobre los clichés del género. Hay muchos formatos así. La diferencia con eso es que somos un grupo cercano, somos más o menos los mismos, hacemos nuestros discos y tenemos gente muy joven en el escenario. Queremos hacer un espectáculo mucho más cercano y contamos historias. El tango nació con mucha cosa divertida y una música para bailar, para conocerse las parejitas. Tratamos de jugar más con eso.

DIEGO BLANCO

—Describa «Alma de bohemio».

—Utilizamos el título como un grito de guerra. Es un tango de 1914, muy lírico, una belleza. Como el año pasado era el centenario de Piazzolla tratamos de hacer un recorrido desde el tango negro, el de los hijos de los descendientes de los esclavos en los barrios más antiguos de Buenos Aires hasta el de la emigración, el prostibulario, el canción de Gardel, las grandes orquestas. Hasta llegar a Piazzolla. Con mucho vestuario y una parte divertida.

—El tango es elegancia pura, desde el minuto cero del baile.

—Ya el abrazo del tango es precioso. La poética es impresionante, la lírica, tiene mucha filosofía, metafísica y hasta en la canción romántica pone mucho énfasis en el sentido de la vida.

Música y baile

El grupo está dirigido por el guitarrista Alejandro Picciano y completado por el pianista Federico Peuvrel, el bandeonista revelación Matías Picciano y la vocalista Melisa Fernández. En danza y coreografía, las parejas formadas por Carlos Guevara con Débora Godoy, David Suárez con Juana Escribano y Guillermo León Henao con Gema Leiva.