Adiós a Ramón Marful, en Foz, el cura que se hizo «querer por todos»

i. e. FOZ / LA VOZ

A MARIÑA

XAIME RAMALLAL

Mañana se celebrará un funeral en su honor en Burela

16 nov 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Decenas de sacerdotes de la diócesis y de otros puntos asistieron ayer al funeral celebrado en Foz por Ramón Marful Rodríguez. El vicario general de la diócesis, Antonio Rodríguez Basanta, compañero y además, amigo del fallecido, como muchos de los presentes, presidió los actos e hizo su semblanza.

«Don Ramón foi un sacerdote, diríamos, de ‘recorrido medio’ na nosa Diócese. Soubo ser nos sus comezos un bo cura no medio rural, promocionando social e culturalmente ós veciños; soubo ser tamén un cura de vila do interior e da costa, sintonizando co mundo do mar e da emigración. Os destinos ós que foi enviado -Cabanas, Xove, Guitiriz e Burela-, dan fe do seu espíritu de disponibilidade e obediencia para ir a onde se cría que era necesario. E alí onde estivo, pouco a pouco, paseniño, ía botando as súas raíces, tecendo as súas redes de relacións e amizades, facéndose querer por todos, particularmente polos máis sinxelos e necesitados». afirmó el vicario de la diócesis, señalando que Don Ramón fue también un cura «moi rezador», un párroco que cuidaba también el culto y se preocupaba por la catequesis, tratando de no perder la relación con los más jóvenes, con las parejas de recién casados y con las familias. Tenía, añadió, «unha especial preocupación por todo o que tiña que ver coa visita e a atención ós enfermos e a labor de Cáritas».

Don Ramón, como le conocían sus feligreses, fue enterrado en el cementerio parroquial de Foz, junto a sus padres. Ayer, se celebraron los actos en la iglesia parroquial de Foz, con el párroco Antonio Valín, presente.

Mañana, día 17, a las 19 horas, se celebrará otra misa funeral en la iglesia parroquial de Burela, donde Don Ramón ejerció como párroco durante diecinueve años y donde supo ganarse el cariño y el respeto de sus feligreses. Allí impulsó mejoras, ayudó a los más necesitados y conectó con sus gentes, desde su retranca y ejerciendo siempre de focense.

El vicario de la diócesis, Antonio Rodríguez Basanta, presidió ayer los actos litúrgicos