Para Ahmed Rashid, Pakistán es el gran peligro.
-La situación en Pakistán es peor y mucho más peligrosa que en Afganistán, donde las cosas están claras, es blanco o negro. En Pakistán hay muchas áreas grises, el Gobierno y los extremistas están mezclados. El deterioro en los seis últimos meses ha sido brutal. No hay un liderazgo claro, ni del Ejército ni del Gobierno, contra los extremistas. Mientras los políticos se pelean, los extremistas y los talibanes paquistaníes crecen y la economía se derrumba. Todo ello en un país con armas nucleares y en conflicto con la India. Si las cosas no cambian, Pakistán podría convertirse en un Estado fallido en seis meses.
-¿Siguen apoyando los servicios de inteligencia paquistaníes a los talibanes?
-El ejército, a través de su servicio de inteligencia, apoyó a los afganos más extremistas durante la yihad contra los soviéticos, a los islamistas de Cachemira y a los talibanes en los noventa. Musharraf prometió a Bush que dejaría de apoyar a los extremistas, pero no lo hizo. Ahora Pakistán mantiene la opción talibán abierta. El servicio de espionaje militar -el ISI- los protege y los deja actuar. El ejército hace un doble juego, por una parte apoya a las tropas de EE.?UU. y por otra a los talibanes. No tiene una estrategia común con el Gobierno. Es una política muy peligrosa porque ahora han surgido los talibanes paquistaníes que amenazan al Estado.
-¿Pakistán estuvo detrás del atentado de Bombay?
-El autor fue un grupo paquistaní que quería crear una crisis con la India para que el Ejercitó paquistaní que trataba de frenar a los talibanes en la frontera occidental tuviera que irse a la oriental. Han tenido cierto éxito porque desde el atentado ha habido más acuerdos de alto el fuego entre el Gobierno y los talibanes. Pero no creo que el Gobierno esté involucrado.
-¿Dónde está Bin Laden?
-Creo que en la parte paquistaní de la frontera, pero no sé dónde exactamente.
-¿Cree que si Pakistán tuviera la firme voluntad de capturarle lo haría?
-Sí, pero sería necesario que tomase una actitud más ofensiva y para ello es preciso liderazgo, servicios de inteligencia y apoyo popular. No creo que lo proteja, pero no está buscándolo activamente de forma suficiente.